Capítulo 5: Demencia por elección

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El sonido bipeante de las máquinas en ese cuarto hacía más adormecimiento a su cuerpo que el propio sedante. Su mirada estaba perdida, no quería concentrarse en los policías que intentaban sacarle algo de información. Que moviera la mano, que escribiera en una pizarra, algo de lo que había presenciado ante el ataque pero Taehyung no quería recordar porque eso, le dolía, más que su propio rostro desfigurado.


Tuvo que intervenir la enfermera que estaba a su cuidado para pedirles que salieran y lo dejaran descansar. Una señora demasiado amable con Taehyung por eso no guardó en reparos cuando casi saca a empujones a los uniformados.


–Vaya día ¿eh? Los policías siempre atacando a los indefensos. – dialogó la enfermera con el menor. Captando su atención al ver cómo iba preparando un suministro más de analgésicos e inyectarlo en un suero. Sinu soltó un pequeño suspiro mientras descendía en un asiento para hacerle compañía, afectada indirectamente por el caso de tan joven muchacho, podría ser su hijo y eso hacía que tenga más atención con él que con otros pacientes.


Una semana había pasado desde aquella madrugada donde una fatal agresión ocurrió en un callejón, Sinu quedó horrorizada ante las consecuencias en ambos cuerpos. Procurando desde ese entonces cuidarlo a falta de una presencia familiar.


Taehyung había girado levemente su cabeza vendada para mirarla. Ella era su proveedora de información y sabía cómo manipularla. Sin saber si aceptaría, Taehyung una tarde lloró y se alteró para que le dieran noticias de Hoseok pero nadie le entendía. Planeando así esperar a la enfermera que demostraba afecto hacia él, sin venda alguna en su cabeza. A penas Sinu había entrado, él no le dejó tiempo de avisar a los demás pues había hablado. Hoseok... Ver... Dijo simplemente, su boca descociéndose y lanzando un grito por el dolor, tapándose rápidamente con una almohada para que no le escucharan los demás.


Su mensaje había sido claro y ella angustiada, sedó a Taehyung para de nuevo cocerle los laterales de su boca con ayuda del doctor, ganándose además una reprimenda por no cuidar de Taehyung. Supo ahí Sinu que debía llevarle con el otro joven, con Hoseok, para que así el menor no atentara contra su salud.


Un día después, con todo el reposo y acato de las órdenes de Sinu, Taehyung pudo ir a ver a Hoseok pero de modo infiltrado pues él aún no tenía orden para levantarse de su cama.


Y lo que vio no fue a Hoseok en una camilla, fue la imagen de Hoseok en su cuarto, el de ellos. No lo vio con tubos y máquinas al lado de él, lo que vio fue a un Hoseok durmiendo y acurrucado a una almohada. Ni las vendas en su cabeza significaron algo peor, solo lo usaba porque tenía frio, eso creía Taehyung. El menor quería hablarle, decirle que pronto se recuperaría y saldrían a su hogar en poco tiempo, que no llorara por él, cuando en realidad era Taehyung quien derramaba lágrimas silenciosas. Momentos después Sinu tuvo que llevárselo y esta vez Taehyung acatando pues no quería interrumpir su siesta.




Sinu frunció los labios en una línea recta, ver a Taehyung observarla con unas lágrimas cayendo de sus ojos no le era de agrado, la envolvía en tristeza también. Incorporándose de su sitio, suavemente limpió los surcos que delataban sus memorias.

[ Vhope ] JokerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora