Todo estaba levemente a oscuras, dos cuerpos desnudos yacían descansando inmersos en sus propios sueños. La delgada capa de sábana los cubría hasta la altura de los hombros, una mano reposaba sobre el vientre del otro, sus cabezas ladeadas como si aun en sueños pudieran verse.
Una mano de Taehyung cubría la de Hoseok ¿Simple gesto? La única diferencia era que esa unión representaba mucho más de lo que pareciese.
Aún en un sueño incómodo para Taehyung, teniendo pesadillas acerca del ataque de un lobo el cual le despedazaba una pierna, este respiraba tranquilo pero con el ceño fruncido. Hubo un pequeño espasmo sobre su mano; la que cubría la de su novio, y como si estuvieran conectados, la mano de Hoseok hizo una leve presión entre sus dedos. Se movió y lo acercó por simple costumbre, pero para Taehyung ese detalle fue como un salvavidas para despertar de esa oscuridad.
Abrió sus ojos lentamente, algo cansado y tuvo muy de cerca el rostro de su novio. Los recuerdos de la sangre y las mandíbulas de ese animal comenzaban a rondar por su cabeza.
Sonrió, porque aunque su mente le jugara malas pasadas, aún tenía a Hoseok frente suyo. Por más que se atrevieron a lastimarlos aún seguían juntos.
–Hoseok. – le llamó, moviendo su brazo para que despertase.
El mayor gruñó levemente y lo apretó más. Taehyung volvió a llamarlo mientras le apretaba su nariz. Hoseok gruñó de nuevo tratando de respirar pero al fin Taehyung ganó.
–¿No puedes dormir? – le preguntó, mientras trataba de encontrar el rostro de Taehyung entre la oscuridad.
–Te amo. – le dijo con todo su corazón. Respiró profundo y volvió a confesarle. –En serio te amo mucho, Hoseok. –
Hoseok sonrió, lanzando una pequeña brisa con su respiración. Estaba cansado pero no tanto como para no corresponder a sus sentimientos, así estuvieran en plena madrugada y se tuviera que levantar temprano.
Los brazos de Taehyung se zafaron de su agarre amablemente y le rodeó su cuello, a la espera de su respuesta.
Hoseok pasó su brazo por su espalda desnuda y lo acercó hasta que sus cuerpos estuvieran pegados. No había excitación en ese momento, solo un sentimiento puro.–Taehyung, te amo demasiado. –
–Gracias por hacer la promesa, en serio se siente increíble. – comentó Taehyung en voz baja, su secreto iba a estar seguro entre los dos. Ambos se besaron como sello de sus declaraciones para por fin ceder al más tranquilo de sus sueños.
*
Hoseok despertó primero; como siempre, estaban revueltos con la sábana. Los perros ya hacían ruido en la sala.
Bajó de su cama y fue directo al baño. Se aseó y en pleno baño recordó que era su cumpleaños. Se felicitó así mismo, planeando lo que iba a hacer en todo el día. Tenía que dar instrucciones a Taehyung para preparar la pequeña reunión en su casa. Aunque pensándolo bien, no sabía si el menor estuviera de ánimos para celebrar algo, debido a lo que le había pasado el día anterior.
Mientras se iba colocando su ropa, y al ver que Taehyung no despertaba, fue a hacer su labor del día. Jaló las sábanas y un Taehyung desnudo le dio los buenos días. Alzó su pie y le aplastó sus pompas, meciéndolo.
–Levántate, levántate. – le decía en cada movimiento. Las pompas de Taehyung estaban muy suaves ese día. Taehyung pasó su mano a su atrás para apartar su pie, haciendo quejidos.
–¿Por qué me haces esto? – se quejó, sin abrir los ojos.
–¿Acaso olvidaste que día es hoy? –