El día que estabas en el local de celulares en el centro, se me revolvió la mente a penas te vi de espaldas.
No podíamos hablar porque ahí estaban tus papás, pero quería que me vieras, que supieras que yo había pasado por ahí y que te había visto.
Le dije al que iba conmigo que preguntara por algo para su celular para ponerme ahí y que voltearas a ver.
Tuve que conformarme con eso esa noche.
En ese momento me entró nostalgia y fui a comprar una cerveza, y me senté a beber y a fumar, pensando en todo.
Me acordé de lo mucho que significa tu nombre, y de lo mucho que te quiero,
y pensé... ¿hasta cuándo?Hoy perdí a otra persona importante, por inseguridad, y miedo.
Hoy me volvió a pasar que por idiota no vi las cosas valiosas que tenía en frente hasta que se fueron,
y he llorado y me ha dolido mucho.He sentido una sensación horrible en el vientre, como si lo tuviera lleno de rabia y culpa;
y en el pecho, como si lo tuviera lleno de gritos y lágrimas.Y creo que ya lo hice, pero quiero pedirte perdón.
Porque hoy más que nunca en mi vida me arrepiento de no verte, cuando estabas ahí.Hoy he entiendo muchas cosas que no había podido.
Hoy entiendo que cuando de verdad se quiere, se arriesga. Sin miedo al sufrimiento, a la distancia, a la espera.
Cuando de verdad se quiere, ninguna inseguridad es pretexto para no entregarse.
Porque cuando de verdad se quiere, esa persona suprime tus miedos y te hace estar seguro