Viaje Inesperado [N.H.]© Parte#1

68. ¡¿Dos en una noche?!

El insistente sonido sordo, lejano y familiar, me hace salir de mi sueño. Me remuevo en mi lugar y frunzo el ceño con mis ojos aun cerrados. Sé que ya no voy a poder dormir de nuevo. Odio que me pase eso.

Abro mis ojos, y lo primero que veo es un enorme ramo de rosas sobre la mesita de noche. Una sonrisa se forma en mis labios. Niall sí que se propuso inundar mi apartamento con rosas tan bellas.

Levanto mi rostro y sonrío aún más al verlo debajo de mí. Niall se encuentra profundamente dormido, rodeando con su brazo mi cintura desnuda.

Me regodeo en los recuerdos de la noche anterior, y mi corazón se acelera cuando las imágenes de nuestra noche haciendo el amor una y otra vez inundan mi mente. Un suspiro sale de mis labios. Me encanta éste chico.

El sonido anterior vuelve a escucharse desde la sala, al parecer. Es mi teléfono. Espero que no sea nada que implique preocuparme.

Con mucho cuidado de no despertar a mi bello durmiente, salgo de la cama. Busco mi ropa interior, encontrando mis bragas al lado del bóxer de Niall y mi sujetador debajo de la cama. ¿Acaso pasó un tornado por aquí?

Me coloco mi ropa interior y encima me pongo la camisa blanca de mi novio. No creo que le importe mucho.

Corro a la sala abotonando la camisa al mismo tiempo. Parece una llamada importante, al menos para que estén llamando una y otra vez. Para cuando encuentro y saco el teléfono de mi bolso, la llamada se corta. Vaya suerte la mía. Bueno, tampoco iba a venir corriendo desnuda.

Reviso el registro de llamadas y veo cinco llamadas perdidas de dos diferentes números. Tres son de mamá, mientras que las otras dos son de Maddy. ¿Maddy? Espero que no sea algo malo.

Justo cuando estoy por marcar el número de Maddy, mi teléfono se enciende con una llamada entrante. Es mamá. Respondo.

– Hola, mamá.

– Cariño, por fin contestas. –habla con un suspiro de alivio. – ¿Dónde estás?, ¿estás en el apartamento de Niall?, ¿él está contigo?, ¿durmieron juntos? –pregunta mamá con interés para nada disimulado. Esperaba al menos un "buenos días, hija", pero me vengo a topar con "Mama Súper Chisme"

– Mamá, estoy en mi apartamento, como eres preguntona. –respondo con una sonrisa burlona. ¿Qué le dio por estar de chismosa hoy? – ¿Qué sucede?

– Se están cuidando, ¿verdad? Aun no quiero nietos, cariño. Aun eres muy joven para...

– ¡Mamá! Por dios, ¿por qué tienes que hablarme de esto tan temprano y por teléfono?

– Son las diez de la mañana, no es tan temprano. Solo quiero saber si mi pequeña se está cuidando lo suficiente para...

– Si, mamá, si, ¿Contenta? Mejor dime rápido que es lo que quieres, si no para preparar el desayuno o algo. –lo que sea con tal de no tener esta conversación.

– Está bien, está bien. No te alteres. Sabes que me preocupo por ti.

– Lo sé, mamá. Pero hay cosas que son privadas. Pero, en fin, ya no quiero seguir discutiéndolo. ¿Qué necesitas?

– Bien, llamaba para avisarte que estaré todo el día en la terraza, me iré de la oficina en media hora.

– Espera, ¿qué terraza?

– La terraza donde será el evento de esta noche, cariño. ¿Lo olvidaste?

– ¿Será en una terraza?

– Si, cariño. Recuerda que Bobby y yo ya organizamos todo, solo falta ir a recibir las cosas para el evento.

– Oh, sí, claro. ¿Cómo olvidarlo?