Tender Love {Chanyeol/Jongin} [Ver. Español]

~22~

Chanyeol se miraba el brazo y muñeca a través del gran espejo de la habitación. Se veía genial y a él como a Naeun les gustaba su nuevo tatuaje. Ella le comentaba sobre lo cool que se veía, para hacer tiempo. . , ella era la  siguiente.

─Ve ─Chanyeol le señaló la silla con la cabeza.

Ella se puso pálido al mirarla y al chico preparando sus materiales para ella. Chanyeol la tomó de los hombros y la miró directamente a los ojos, los cuales mostraban lo preocupada que estaba.

─Estarás bien. Ve ─le dijo con una pequeña sonrisa y le acarició la cabeza.

Naeun tomó una respiración profunda y se sentó en el sillón. Miró al chico, sus materiales, el suelo, las fotos en la pared, los zapatos del chico, cada rincón del lugar tratando de calmarse.

Después de limpiar el área, el tatuador le puso una plantilla en su brazo izquierdo con la palabra BALANCE en el tipo de letra que ella había elegido. Le gustó cómo se veía y ese hizo que lo quisiera más. Un minuto después el tatuador tomó su maquinita y empezó su labor.

Chanyeol acercó una silla junto a Naeun y se sentó. La tomó de la mano derecha para que no estuviera tan asustada o sintiera tanto dolor. Ella miró sus manos y al sentir su toque, su corazón dio un brinco. El segundo en que el chico comenzó a trabajar en su piel apretó la mano de Chanyeol y se sobresaltó. ¡Sí que dolía!

─No se mueva, por favor ─el chico le pidió al detenerse.

─No te muevas ─Chanyeol le dijo y ella solo lo miró mal.

El chico entonces comenzó a tatuarle y ella intentó no moverse. Estaba mordiendo su labio inferior con fuerza y apretando la mano de su acompañante. Chanyeol comenzó a hablarle de cualquier cosa para distraerla, pero ella ni siquiera podía prestarle atención por el dolor. Desvió la mirada de su brazo y lo miró a él.

─No llores ─él le dijo, gracioso.

─No estoy llorando, babo ─ella rió suavemente y se limpió la lágrima que estaba a punto de salir de su ojo.

Él sostuvo su mano entre las suyas y la acarició mientras ella lo observaba, pensando en otra cosa que no fuesen los pinchazos en su piel.

─Digamos que un chico vestido con una sudadera se acerca a ti y te entrega un libro, cuando empiezas a leerlo te das cuenta que es sobre toda tu vida. ¿Leerías el final? ─Chanyeol le preguntó.

─No sé ─ella respondió.

─Y si lo lees hasta donde estás ahora mismo y te das cuenta que solo quedan tres páginas.

─¡Qué miedo, no! ─exclamó con una risita─. ¿Pero por qué el chico lleva una sudadera?

─No sé, Naeun. Tal vez tiene frío.

─Tu mente es rara.

Él rió y pensó en algo más para hablar.

─¿Qué ha sido lo más estúpido que has hecho?

─Hmm. . . ─Ella lo pensó, pero no tenía ni idea.

─Esta mañana mientras me duchaba me resbalé y lo primero que mi estúpido ser hizo fue tratar de agarrar el agua ─le comentó con seriedad. Naeun, e incluso el tatuador, estallaron en risas.

─Que tonto─ella se burló.

─¡Fue un reflejo de supervivencia!  ¡No se ría! ─le dijo al chico y este alzó sus manos en son de paz.

*

Eunji se encontró con su madre en la sala de espera del hospital, donde le había dicho que se vieran para así ir a la habitación donde estaba su hermano. Al verse se dieron un abrazo.