La Última Vengadora - Hermione/Loki

2.- Hellicarrier

- ¿Está usted bien? –Hermione, anonadada, asintió lentamente con la cabeza- Me llamo Phil Coulson

-Hermione Granger

Estrechó su mano temblorosamente, dejando salir una bocanada de aire con alivio al poder confirmar que no era un enemigo. Lo entendía, aquel hombre era probablemente alguien que caminaba por los alrededores y había visto a una muchacha llorar, seguramente se sintió mal por ella y quiso venir a entregarle un poco de apoyo emocional.

Aquello tenía sentido, ella ayudaría a alguien que sollozaba por las calles.

-Sabemos quién es –sonrió –La bruja más brillante de su generación

- ¿Quién es usted, exactamente? –Aquel hombre mostró sorpresa ante su pregunta, parecía levemente desconcertado.

- ¿No se puso en contacto SHIELD con usted?

- ¿SHIELD? –intentó recordar si, en algún momento en su atareado trabajo, había tenido algún tipo de contacto con alguien que no conociese. Recordó un pequeño detalle- Recibí un mensaje a mi móvil, decían que una compañía necesitaba hablar conmigo. No decían mucho más ¿Eso es SHIELD?

-Estoy bastante seguro de que si se trataba de nosotros

-Hace un par de semanas de aquello

-Siento nuestra tardanza, entonces –Phil dio la vuelta y le ofreció su brazo, ella decidió no cogerlo, pero él no pareció afectado por aquello- Venga conmigo, por favor

Y Hermione decidió hacerlo, decidió seguir a aquel hombre hasta su coche. Por mucho que lo pensase, no tenía ninguna razón para hacerlo realmente, pero Phil emanaba una aura tan tranquila y calmada que ella no pudo evitar que sus pies siguiesen los pasos del hombre en traje.

Pudo ver otro coche exactamente igual detrás del coche al que estaba caminando, también vio a dos hombres, también trajeados, salir de aquel.

-Mis cosas –señaló la caja a los pies de la puerta- Las necesito

Coulson sonrió en su dirección e hizo un par de señales de manos a los dos hombres en trajes, después abrió la puerta del copiloto para ella. Hermione entró obedientemente a este con la mirada clavada sobre aquellos hombres, solo para ver a uno de ellos coger la caja de sus pertenencias y rápidamente colocarla en el asiento trasero del coche al que ella estaba montada, después aquel hombre salió de su campo de visión.

-Supongo que eres un mago

-Supone usted mal

Después de estar bien sentada en el coche, por el retrovisor pudo ver como la puerta de su hogar se abría de par en par, frunció el ceño al darse cuenta de que Ronald había descubierto el hechizo para contrarrestar el que ella lanzó. La mirada de su ex prometido cayó en ella, sentada en el coche de un completo desconocido y Coulson en el lateral del coche, soltó un alarido fuerte y sacó su varita.

"De todas formas no se va a poder defender, es un inútil igualmente" resonó en el fondo de su mente y, por un leve segundo, se sintió mal por haber pensado de aquella manera.

Hermione miró a Phil, por sus mejillas cayendo un par de lágrimas, antes a que ella se frotase las mejillas de forma fuerte. Quería dejar de llorar, morderse la lengua y demostrarle a Ron que ella era mejor persona, pero su mente estaba colapsando.

Quería, durante unos minutos, respirar tranquila y empezar a lamerse sus tan recientes heridas.

Phil Coulson simplemente le dedicó una sonrisa calmada.

-No se preocupe, yo me encargo

La castaña, desde el coche, solo pudo ver al pelirrojo gritar con fuerza y zarandear su varita hacia ellos. Temió por la seguridad de Phil, Ronald era un hombre bastante temerario cuando se hablaba de la magia, pero Coulson simplemente sacó un aparato de su bolsillo y apuntó hacía el pelirrojo. Se ex pareja empezó a temblar hasta que cayó al suelo, Hermione quiso creer que estaba inconsciente y no muerto.