Con el amor NO se juega (Goku × Vegeta)

Parte 47 : No soporto más. (en este capitulo me pondré poética)

El chico se tiró en la cama y miró el techo de madera. No debió estar celoso, y menos con el mejor amigo de su amor. Y fué un tonto al gritarle de aquella manera, y más tonto todavía irse cerrando la puerta por fuera.
Miró más el techo y sintió como finos cristales de tristeza caían sobre la sábana de la cama. Pensó en que la relación es como un espejo : Es mejor dejarlo roto, que lastimarte tratando de repararlo. Y obvio, no compraría un espejo nuevo pero tampoco tiraría los pedazos a la basura. Trataría de repararlo, aunque se hiciera heridas grandes en el proceso o llegara alguien y volviera a romper el cristal. Pero la misma frase dice que es mejor dejar la relación rota....entonces...¿Se quedaría solo esperando que su pareja llegara y reparara al espejo así como si nada? El se dañaría antes que él.

Miró hacia una mesa de la silenciosa habitación y entonces, vio algo en especial, algo que convirtió el silencio en un griterío dentro de su cabeza. (Imagen de multimedia) Se paró y tomó aquel dichoso objeto entre sus suaves manos y se dijo : "¿Esta será la última salida?" 
Su rostro se reflejó en el filo de la navaja y su consciencia respondió :

Sí.

Asiente y se sube una manga de su chaleco, con mano temblorosa. Afiló un poco más la navaja y posó el filo en su muñeca, causando gran alivio en su ser y una sensación de seguridad increíble.

Hundió más el filo de la navaja y la pasó por todo el alrededor de su mano, creando un lazo de falsa seguridad y consuelos inexistentes. Cayó la sangre al piso y sintió como una espiritualidad entraba en su cuerpo y se limpiaba de todas sus penas.

"Eso es lo que he estado buscando"  se dijo, para después cerrar sus ojos y caer inconsciente, soltando la navaja.

TOC....TOC....TOC....

Era N°18, que venía a hacer limpieza. Golpeó a la puerta un par de veces más, y un sentimiento de peligro invadió su mente cuando descubrió olor a sangre.

18 : ¡Señor Yesung! ¡Ábrame, por favor! —imploraba la chica, sacudiendo el pomo de la puerta. Tomó impulso y se estrelló contra la puerta, abriéndola de golpe. "Aunque mi amo no me permitía hacer esto, tuve que hacerlo"
Se adentró en la pieza y se encontró con un Vegeta inconsciente en el piso, con una navaja a centímetros de él y una cortadura en la muñeca.

18 : ¡¡¡¡Señor Yesung!!!!

El eco de su grito sonó en su mente y pasaron dos segundos rápidos, solo para enterarse de que Vegeta estaba yendo por mal camino.