No era amor 《BrandonMeza》

22. Se cierra.

"@carlytellez: me quiere engordar. Alo polisia? 😂😂 te quiero niño🖤 @brandon_meza".

Y bueno, así pasé el mejor cumpleaños de todos.

Ayer diez de octubre, Oscar se fue de viaje a New York pues tenía que hacer unas cuantas presentaciones con los chicos de Red Rooster, una de las bandas a las que mi novio pertenecía como baterista, según me dijo, serían dos semanas nada más.

Así que yo también viaje pero a Monterrey, quería ir con mis papás y pasar un par de días por allá. Una vez que llegué al aeropuerto, como a medio día y documenté mi maleta, le marqué a mi mamá a la casa. Me contestó Fernando y le dije que sí podía pasar por mí más tarde, él sin problemas aceptó y colgamos.

Luego de hora y media ya me encontraba en el pasillo de salida justo por la mitad cuando decidí detenerme unos segundos para quitar el modo avión de mi celular y poder marcarle a mi hermano, seguí avanzando, esta vez con el teléfono en mi oreja izquierda y la maleta en la mano derecha.

Salí por la puerta principal, hacia el estacionamiento y en la entrada/salida venía mi hermano con una enorme sonrisa, me abrazó con ganas y yo también lo abracé, teníamos dos meses de no vernos.

El viaje a casa estuvo tranquilo, platicamos de varias cosas, me puso un poco al día de lo que estaba haciendo en el trabajo y que era muy probable que pronto le pidiera a su novia matrimonio.

Yo estaba muy feliz con esa idea, mi hermano se merecía ser feliz, igual que Arely, quien por cierto esperaba que estuviese aún en la casa y no se hubiera ido al estudio todavía.

Al llegar al fraccionamiento y posteriormente cuando mi hermano terminó de estacionarse salí casi corriendo de la camioneta al ver a Arely salir de la casa, ella me vio y también se me acercó, nos abrazamos con fuerza. Nos habíamos hecho falta.

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Terminé por acompañar a mi hermana al canal, eran pasadas de las tres de la tarde, hacia tiempo que no pisaba multimedios y habían remodelado varías cosas en la plazoleta.

Una vez que llegamos al estudio 1 sonreí al ver que habían vuelto a pintar las paredes y ahora estaban en otro camerino más grande, al fin cabían ya todos.

No pude evitar escuchar por los pasillos rumores de que Brandon se iría al DF, todo de boca de Miguel Díaz, aunque yo no he querido preguntarle nada aún a Meza, en fin, me divertí mucho con los chicos y Brandon al siguiente día (por ser sábado) me invitó a salir con él.
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Sábado, bendito sábado.

Eran las siete con treinta minutos de la noche y yo me encontraba en el asiento del copiloto en el carro de Brandon.

¿Qué hacía yo en el carro de Meza? Él puede ser muy convincente cuando se lo propone ¿Cómo me había convencido? Me prometió unos tacos al salir del ensayo con sus niñas.

Sí, íbamos directo a la "Meza Academy" aunque hoy lo notaba un poco más triste, desde el medio día cuando pasó por mi; él siempre estaba sonriendo y eso se me hacía extraño en él.

—¿qué tienes morro?— pregunté con curiosidad.

—¿eh? Ah, no te preocupes. No es nada... no te preocupes, al rato te enteras.— fue lo único que dijo. Y yo decidí no insistirle, respetaba lo que dijo.

Mientras él conducía con música del cartel de santa yo checaba twitter, facebook e Instagram; por más que no quería preguntarle nada, en las redes sociales de lo único que se hablaba era de eso, "Brandon Meza abandonará acábatelo".

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Según Alejandra (una de las niñas que bailaban con Brandon) quien aprovechó para acercarse a mi, pues Brandon había ido a comprar un agua al seven dijo que era la primera vez luego de mucho tiempo que llegaba más temprano de lo normal, ya que regularmente llegaba pasadas las ocho.

Ella y las pocas chicas que también estaban esperando a que Brandon llegara me decían que lo notaban muy apagado, me preguntaron que sí sabía algo, yo negué, en verdad estaba igual que ellas.

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Ya había finalizado los ensayos, según entendí tenían que presentarse el lunes en vivalaví, Brandon les dijo que se sentarán en círculo él se quedó parado en medio de todas para que lo vieran y yo estaba en uno de los puffs que tenía allí.

—Morras... tengo que hablar de algo con todas...— comenzó a hablar, noté que arrugaba la nariz y se rascaba la nuca; estaba nervioso.

—¿es verdad que te vas a ir al DF?—preguntó Alejandra por todas, vi como algunas palidecían y otras aguantaban la respiración.

—A chinga ¿Quién dijo eso?— le preguntó, seguía nervioso pero intentaba disimularlo.

—Una chava que según es muy cercana a ti, una Mezagirl... Grecia se llama creo, lo publico en facebook...— contestó otra chica y las demás decían que sí. Brandon se rió, era una risa nerviosa; no quería decirlo, pero veía en sus ojos que estaba ocultándoles eso a las niñas, sí se iba a ir.

—Bueno... lo que les quería decir es que ...— pausó se giró para verlas a todas y luego me miró a mí —la próxima semana, el viernes; la academia se cierra.— soltó con tristeza. Ninguna niña dijo nada, todas estaban mudas. El ambiente cambió, de estar felices todas se encontraban tristes. —bueno... morras... las veo el lunes en el canal, a las ocho; lleguen puntuales por favor, la clase de hoy ya se acabó, se pueden ir a sus casas...— intentó romper la tensión. Algunas comenzaron a levantarse, seguían en silencio, no platicaban, mi vista estaba fija en Brandon; varias chavas fueron saliendo. Me paré del asiento y sentí la necesidad de acercarme a Brandon.

Me acerqué y lo abracé, lo abracé con fuerza, él me correspondió, sin decir nada, sólo me apretó contra su pecho; entendí por qué se sentía así, sentía que de algún modo estaba fallándoles a las chavas.

—tranquilo, ellas lo entenderán; todo estará bien, chinos— intenté animarlo.

—espero que así sea, pero bueno...— se separó de mí y me sonrió de lado. —te debo unos tacos... ¿nos vamos ya?— me preguntó riendo. También me reí y asentí.

Esperé a que cerrara el local, nos subimos al carro y luego de un rato llegamos a un puesto de tacos, cenamos y me llevó a casa, me despedí de él con un beso en la mejilla y una abrazo; me metí y luego de bañarme me quede profundamente dormida.