36. ¿Quieres ser mi novia?

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Ya no escuchaba nada más que mi respiración y el sonido de las aves. De la nada en mi cintura unas cálidas manos se posaron con delicadeza obligándome a caminar con su ayuda.

Esa persona que me guiaba no emitía palabra o sonido alguno así que me era imposible saber quién era, me estaba poniendo muy nerviosa. De pronto paramos y le sentí alejarse, escuché el ruido de una silla siendo arrastrada, de nuevo su tacto en mi cintura guiándome supongo a aquella silla, el sonido se escuchó una vez más y sentí otra presencia detrás de mí, mis ojos fueron descubiertos dejándome así, ver a la persona que estaba detrás de todo ese misterio.

Mis pupilas no daban crédito a lo que veían, el cielo ya estaba obscuro y algunas estrellas comenzaban a hacer su aparición, él, tan guapo como siempre se hallaba sonriéndome nervioso pero seguro a la vez, vestía una camisa de cuadros grises con negro y debajo una playera blanca.

Me dispuse a observar mejor el lugar en el que nos encontrábamos un jardín muy hermoso con muchas luces pequeñas y velas.

—Que hermoso lugar, pero me atrevo a preguntarte ¿Qué está pasando?— el me miró sin quitar su bella sonrisa y tardó un poco en responder a mi pregunta.

—Esperé mucho tiempo este momento, es decir, un momento así... pero antes que nada quiero que disfrute esta vista y me acompañe en la cena esta noche, Señorita Téllez ¿está bien?— no dejamos de mirarnos ni un solo instante.

—Está bien... ¿Que cenaremos esta noche, joven?— cuestioné intrigada, él hizo una seña y sonreí al ver quien se aproximaba, Ruso se había cambiado y ahora traía un traje elegante, me miró con complicidad y nos dejó sobre la mesa dos cartas, con lo que supongo era el menú de esta noche. Sonreí ante lo que se ponía ahí:

PRIMER PLATO: Espagueti a la boloñesa y puré de papa.

SEGUNDO PLATO: pechuga de pavo con salsa de fresa y nuez.

POSTRE: pastel de queso con chocolate y almendras.

—Espero y el menú de esta noche sea de su agrado, ¿desean que les sirvan ya?— preguntó nuestro pelirrojo amigo como si fuera un mesero de verdad. Ambos hombres me miraron y solo me limité a asentir, ni siquiera podía pensar con claridad, parecía tan irreal.

—Recuerdo la primera vez que te vi...— habló de nuevo una vez que Carlos se había retirado. —Llegaste detrás de Arely, parecías un cachorro asustado, te veías tan tierna... —no pude evitar reír un poco al igual que él.— Me quedé fascinado con tu belleza, jamás pensé ver a una hermosa chica como tú...

—Que lindo, la verdad es que no sé que decirte... todo esto es tan bonito que parece un sueño.— le interrumpí. —Te esmeraste mucho ¿no es así?

—La verdad es que entre todos me ayudaron, yo solo no lo hubiera podido lograr.— admitió riendo por lo bajo.

1 hora después

Ya habíamos comido y platicado un buen rato, estábamos probando el postre y he de admitir que estaba delicioso. Jamás pensé estar en una situación así, yo creía que solo pasaba en las novelas cliché que leía en Wattpad, pero ahora sé que en la vida real también pasan.

De pronto él se levantó e hizo que yo también lo hiciera y de la nada una balada lenta se comenzó a escuchar (Tinking out loud- Ed Sheeran) , en esos momentos me sentía algo así como en la cenicienta o alguno de esos cuentos para niñas... me abrazó fuertemente apretándome más a él y yo recargué mi cabeza en su hombro disfrutando de su cercanía. La música paró pero no nos separamos sino hasta que él habló.

—Creo que ya es momento de decirte eso que quedó pendiente hace rato... ¿puedes cerrar tus ojos por favor?— me preguntó tomando mis manos entre las suyas. Hice lo que me pidió y sus manos dejaron las mías, lo escuché alejarse un poco y ahora escuchaba una guitarra, alguien comenzó a cantar una de mis canciones favoritas (Alex Campos - tu poeta) yo seguía con mis ojos cerrados, de vez en cuando tarareaba el coro de la canción, le escuché volver y le sentí arrodillarse. —Sé que quizás no nos conocemos desde hace mucho pero... quiero que me permitas conocerte poco a poco y que me des la oportunidad de ganarme tu confianza, cariño y amor... ¿Puedes abrir tus ojos, por favor?— me pidió y así lo hice, al abrirlos pude ver que la mayoría portaba una playera blanca con una letra morada en el centro Jazmín tenía un signo de interrogación, Gaby una Q,  Coi una U, Liz una I, Arely una E, Ruso una R, Chocolove una E, Snuppy una S, Tomato también una S, Alito una E, Daniel una R, Bubalove una M, Ninjarin una I, Lápizito una N, Archi una O, Iván una V, Mayito una I, Raúl una A y mi hermano Fer otro signo de interrogación, en todo eso se formaba la frase "¿Quieres ser mi novia?" Mis ojos se empañaron de lágrimas, él estaba arrodillado frente a mi con un ramo de rosas negras y en el centro una blanca, me miraba atento esperando por una respuesta.

—Esto es un sueño del cual no quiero despertar jamás...— susurré limpiando mis lágrimas. —Claro que quiero ser tu novia Brandon.— en cuanto dije eso él sonrió (más si es que es posible) y se levantó entregándome el ramo y plantando un beso en mi frente.

—Prometo frente a tus hermanos no fallarte nunca y cuidar de ti siempre, Carly.— dijo para posteriormente abrazarme.

Finalmente antes de volver a casa les agradecí a todos los que colaboraron para que esa sorpresa se pudiera realizar y Brandon se ofreció a llevarme de vuelta a casa en su coche.

No era amor 《BrandonMeza》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora