Cumpliendo los catorce

15. Se aproxima un musical.

NARRA SOFIA

Después de todo un fin de semana en estado de reposo por fin puedo decir que estoy como nueva.

Hoy comienza una nueva semana y con ello seguro que una nueva guerra entre Eleonora y yo. Estos dos días del fin de semana parece ser que ha tenido piedad y no me ha hecho ninguna maldad. Sin embargo, no me cabe duda ninguna de que esta semana volverá a gastarme otra de sus bromas pesadas y de mal gusto.

—Hoy seguro que hoy comienzan los ensayos para los musicales —me comenta Anastacia una vez que salimos de nuestro cuarto para dirigirnos hacia clase.

—¿Los musicales? —pregunto un tanto desconcertada.

Anastacia y yo seguimos caminando hacia al ascensor a paso acelerado ya que en quince minutos comienza la clase.

—Claro, todos los años se hacen dos musicales, uno por los alumnos de tercero y cuarto de la ESO y otro por los alumnos de bachillerato —me explica Anastacia.

—¿En serio? —Sigo perpleja ante esta situación tan irónica— ¿Y por que nadie me ha avisado antes sobre esto? —pregunto dando un suspiro de resignación.

No es que odie los musicales de hecho me encanta cantar, incluso en mi casa mis padres solían grabarme cantando. Sin embargo,  si odio el hecho de tener que cantar delante de las suficientes personas como para cagarla y quedar en ridículo.

—Porque nunca lo habías preguntado —responde la pelirroja a la vez que se encoge de hombros y tuerce el labio.

Blanqueo los ojos ante su respuesta por lo incoherente que me parece pero que voy a esperar de Anastacia, al igual que yo esta chica está un poco chiflada. No obstante, las mejores personas están locas, así que...

—¿Como iba a preguntarlo si no lo sabía? —pregunto con voz burlona.

Anastacia me desafía con la mirada y yo la imito haciendo así que ambas nos quedemos en frente de la entrada al ascensor haciendo un duelo de miradas.

—¿Qué estáis haciendo? —nos pregunta Hunter quien llega junto a Flora.

—Un duelo de miradas —responde la pelirroja como si fuese lo más normal del mundo.

—Que normales sois —dice Flora aguantándose de la risa.

Dejo de mirar a Anastacia y centro mi mirada en el rubio que tiene su brazo rodeando el cuello de mi amiga castaña. Es ahí cuando miro directamente a Flora y alzo las cejas de manera lenta y picarona.

Ella abre los ojos con fuerza al notar a que me refiero y niega con la cabeza.

Después de eso los cuatro nos metemos en el ascensor y mantenemos el silencio.

—Hoy comienzan las primeras tomas de contacto con el musical que haremos este año, ¿cuál creéis que tocará este año? —nos pregunta Hunter una vez que salimos los cuatro del ascensor.

—Quiero que tenga potencial. Además, este año espero llegar a tener uno de los papeles principales —afirma con seguridad Flora.

Todos enfocamos nuestra mirada en ella.

—¿Desde cuando te gusta tener protagonismo en este tipo de actividades? —le pregunta Anastacia con sorna.

—Desde que sé que este año vendrán mis padres a verme —aclara la castaña con un pequeño temblor en su voz.

¿Le pondrá nerviosa la presencia de sus padres?