Cumpliendo los catorce

47. Elegir libremente

Capítulo sin editar.

NARRA SOFIA

Silencio es lo único que se escucha en la sala. Ni una palabra, ni un sonido, ni siquiera un gesto. Todos se han quedado perplejos con la noticia y solo se limitan a mirarse los unos a los otros con incredulidad.

Yo, por mi parte, quiero pensar que lo que acaba de decir Susan se trata de una broma pesada. Sin embargo, con lo insensata que puede llegar a ser mi hermana en ocasiones y lo enamorada que está de Jackson me temo que no se trata de una.

Entonces para disipar el silencio comienzo a reírme hasta que todas las miradas se dirigen hacia mi.

—Es una broma, ¿no? Hoy es veintiocho de diciembre, el día de los inocentes —Hago énfasis en la palabra "broma" para calmar el ambiente.

Mis padres deben de estar alucinando con la nueva Susan o mejor dicho la verdadera Susan a la que están conociendo en estas vacaciones. Antes mi hermana nunca hubiese traído un chico a casa y mucho menos hubiese anunciado que se iba a casar con él.

Como cambian los tiempos.

—No lo es —La voz de Susan suena temblorosa.

Ella tiene su mano apretada y apoyada en la mesa. Lentamente veo como Jackson la agarra haciendo que se tranquilice. Si hubiesen sido otras dos personas hubiese pensado que ese gesto fue lindo pero sabiendo que es Jackson no puedo pensar en eso y todo lo que se me viene a la mente es la mentira en la que está viviendo Susan.

¿Cómo se quedaría si descubriera en estos momentos que su futuro marido le ha sido infiel? Y encima con una chica que apenas conocía.

—Susan cariño, ¿no crees que sois muy jóvenes? —Mi madre se arma de valor para hablar.

Susan va a responderle aunque Jackson se le adelanta.

—Señora Steel, su hija y yo estamos totalmente seguros de nuestra decisión. Sabemos que a todos puede parecerles una elección precipitada por lo jóvenes que somos pero para el amor no hay edad. ¿Qué importa si nos casamos ahora o dentro de diez años? Nuestro amor no habrá cambiado y ambos estamos seguros de ello.

—Eso aún no lo sabéis, os queda mucho por vivir —Esta vez es el padre de Jackson quién se anima a contestarle a su hijo.

De reojo miro a mi padre quién tiene los puños apretados y una mueca seria. Se nota que la idea no le agrada ni lo más mínimo.

—Cierto, sois demasiado jóvenes para pensar ya en casaros. Eso no es una decisión que se toma de la noche a la mañana —sigue la madre de Jackson con el reproche.

Cada vez el rostro de mi hermana se entristece aún más.

—Concuerdo totalmente con vosotros —interviene mi madre.

Mi padre luego de haber estado en toda la conversación en silencio, se expresa.

—No os vais a casar, os guste la idea o no, no habrá boda y mucho menos bajo mi consentimiento. No entiendo de dónde habéis sacado esa idea tan tonta de casaros a esta edad cuando tenéis toda una vida por delante —Mi padre habla con firmeza y eso hace que a mi hermana se le queden los ojos aguosos.

—No esperábamos que lo entendieseis, solo que lo aceptarías —La voz de mi hermana suena quebrada y entristecida.

Después se levanta de su asiento y se marcha corriendo de allí haciendo que me sienta mal por ella.