Prefacio

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Sentada aquí intentando poner en palabras todo lo que me ha ocurrido, trato de imaginarme sus caras al leerlo. Supongo que lo primero que debería decirles es que lo que están a punto de leer les resultará tan increíble como lo ha sido para mí, seguramente creerán que debería estar internada en un psiquiátrico. Deben saber que todo lo que voy a contarles  parecerá un completo disparate. Lo único que puedo pedir es que tengan paciencia conmigo mientras rememoro la experiencia más increíble de mi vida.

Supongo que para empezar, debería presentarme. Me llamo Lauren Michelle Jauregui Morgado, pero pueden llamarme Lauren o Lo, como mejor les parezca. Cuando eres cubano-americana, supongo que un solo nombre no basta, de modo que pasé mi infancia deseando que los niños nuevos no me preguntaran cómo me llamaba. Yo se lo ponía fácil y les decía directamente cómo podían llamarme. Todo el mundo me ha llamado Lauren desde que era pequeña, salvo Stacey, mi ex, que todavía me llama perra cuando la veo, pero ésa es otra historia.

Soy la única hija de mis padres, Michael y Clara. Mi madre nos abandonó cuando yo tenía unos dos años, así que no recuerdo gran cosa de ella. Tengo una foto de las dos en el espejo del tocador como recordatorio. Papá decía que no soportaba ser madre y esposa, de modo que optó por no ser ninguna de las dos cosas. Papá la perdonó, pero yo aún pienso que fue una imbécil.

Mamá era un auténtico bombón; la gente me dice que he sacado su sonrisa pícara. Pero a mí me gustan mis ojos que he heredado de papá aunque los míos son de un verde esmeralda, aunque cambian de color con la luz y mi estado de animo, lo que me gusta de ellos es que son expresivos como los de papá: y debo decir que me han sacado de más apuros y líos de faldas de los que tengo intención de hablar. Aunque seguramente podrían sacarle esas historias a Karla: nunca ha sabido mantener la boca cerrada, salvo cuando importa.

 Karla y yo somos amigas íntimas desde que yo tenía unos cuatro años, es la mejor del mundo, prefiere que la llame Karly, he aceptado hacerlo solo porque cada vez que la llamo Karla me lanza una mirada asesina y por lo general deja de hablarme por varias horas, me gusta su nombre aunque a ella no. Se mudó aquí desde Ohio, cosa que me parece muy bien, porque, hablando en serio ¿qué hay en Ohio? Estamos en Chicago: no existe una ciudad como ésta en ninguna parte. A algunos les gusta Nueva York, pero es porque todavía no han vivido aquí. Bueno, a lo que iba, Karly y yo hemos pasado de todo juntas. Hemos tenido todo tipo de problemas, desde líos con nuestros padres hasta con la policía, pasando por los chicos de la esquina, porque es toda una coqueta, Dios, si me pongo a hablar de eso no acabo. En fin, que hemos hecho de todo. No hay nada que no estemos dispuestas a hacer la una por la otra, y esa teoría se puso a prueba hace poco....

A FRIEND IN NEED (camren)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora