Capitulo VI

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El trayecto hasta la playa transcurrió en silencio. Yo notaba la tensión entre estos dos, era muy densa. Ella iba sentada entre él y yo en la cabina de su camioneta. La cercanía de su cuerpo me estaba poniendo algo nerviosa. Tenía que dejar a este mal nacido. Y pronto. Llevaba menos de 2 horas de conocerlo y ya sabía que este tal Austin era el típico macho, controlador, celoso y posesivo. La camioneta de Austin se detuvo en la Playa Noreste de Campus, justo pasando Pratt Lane. Era realmente un día maravilloso y mucha otra gente había tenido la misma idea de pasarlo en la playa.

-Wow, ¿cuántos días ves como éste en abril, ¿eh, Austin? -dijo Camila toda emocionada.

-Sí claro nena, lo que digas, ahora dime, ¿dónde está el barril? Luis dijo que hoy iba a traer uno -dijo el idiota, mirando a su alrededor. Sus ojos se posaron en el blanco-. ¡Bingo! Ahí está, vamos. No quiero esperar para beber un vaso -dijo, al tiempo que salía corriendo de la camioneta en busca de su néctar de los dioses.

-Es agradable ver a un hombre con las prioridades claras -bromeé. La expresión de Camila era triste-. ¿Qué ocurre, Camz? ¿Acaso dije algo malo?

Se volvió despacio para mirarme.

- ¿Camz?, ¿De dónde ha salido eso?

- Amm...yo...no lo sé, de mi cabeza,supongo...¿te molesta que te llame así?

- No, claro que no, me parece lindo, nadie me llama así, mis amigos me llaman Mila, pero me gusta que me llames Camz...si quieres - Su expresión facial paso de una sonrisa a una mueca pensativa y supe que estaba dándole vueltas a lo que dije de Austin, entonces suspiro y dijo- Austin es un buen chico, es solo que.... es que no me gusta que beba tanto. Pero no me hace caso. Cada vez que saco el tema, nos peleamos y él se enfada mucho y entonces... bueno, digamos que ya no saco el tema -terminó con voz apagada.

Ahora sí que estaba más enojada de el mismísimo satanás o Karly cuando la levantaba temprano, que es prácticamente lo mismo.

Si te ha hecho algo, lo mato aquí mismo, Camz no voy a dejar que nadie te haga daño.

Mi instinto de mamá osa estaba alerta y mi pelaje protector se había erizado prodigiosamente. Había algo en mi interior que necesitaba proteger a Camila con todo mi ser. No estaba dispuesta a defraudarla.

Tiene una expresión tan triste. Hace unos minutos estaba tan contenta. Tengo que acabar con su tristeza. Es un día demasiado bonito para sentirse así. Intentaré hablar con ella de esto en otro momento. No parece querer seguir hablando de ello.

-¿Qué te parece si nos vamos a mirar un partido de voley ball o algo así? -le propuse.

Su cara se animó al instante, maravillandome con esa dulce sonrisa suya.

-¿Qué es eso de mirar? ¡Vamos a arrasar con todas! -dijo con un fuego increíble en los ojos. Salió disparada hacia el partido que ya estaba empezado.

Camila corrió hasta unas amigas suyas que estaban allí y les preguntó si necesitaban más jugadoras. Yo me quedé en el lateral de la pseudo cancha y esperé a que la morena me hiciera una señal.

La cara de Camila relucía por el sol y la descarga de adrenalina en su cuerpo, producida por las ganas de jugar.

Es absolutamente adorable... y hetero. Tengo que recordarlo. es muy Hetero...Mierda,¿Por qué siempre son hetero?

Salí de mi ensimismamiento cuando unos dedos chasquearon ante mi cara.

-Tierra llamando a Lauren...¿Lauren?, ¿Lolo?, ¿estás bien cariño? -preguntó.

-¿Ah?...hmm...Sí, sí, ¿vamos a jugar? -pregunté, con la esperanza de descargar parte de mi agresividad en un balón inocente.-Espera- dije, cayendo en cuenta del apodo que uso- ¿Lolo?¿De dónde ha salido eso?-intenté imitar el tono de voz que ella había usado ante mi sobrenombre para ella.

A FRIEND IN NEED (camren)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora