Atrapada en tu infierno.

Setenta y uno.

Tan cerca pero a la vez tan lejos.

Quería escribir la más bonita historia de amor, quería que cualquiera que la leyese suspirara, ansiara vivir una historia así, pero de pronto pensé; para que podría yo hablar sobre lo bonito que es el amor cuando te tengo a ti, para que fingir alegrías cuando ambos sabemos que siempre vivimos rodeados de dolor. Tú, siempre tú, con tus ideas de amor absurdo y esa manía de hacerme creer una a una todas tus mentiras, tu, que a pesar de todo lo malo que me dabas sabias que con tres palabras lindas yo te perdonaba, tu, que aunque nunca quisiste quedarte a mi lado para siempre me diste sonrisas, tu, con tu cara tan preciosa, con tus ojos deseosos, tu, sin mí, tu, conmigo, tu, con ella, tu, solo. Ahora lo veo todo mejor, ahora lo entiendo, nunca hubo un nosotros, siempre nos resumíamos así; tu, ellos, ellas, otros, yo, intermedios, separados, tan cerca pero a la vez tan lejos, tu y yo, tratando de amarnos, de jugar con fuego, tu y yo, viviendo en un dulce infierno.