Atrapada en tu infierno.

Uno.

Solo quería que me quisieras.

Voy a escribir nuestra historia de amor para que quien la lea nos envidie, voy a hablar de lo bonito que era estar contigo y entonces recuerdo algo; no estas, no eres, no fuiste, nunca comenzó nuestra historia de amor, solo eran anhelos, deseos, solo fuiste fantasía y mis paginas solo están llenas de melancolía. Mis insomnios fueron en vano, tu nunca me escribiste, nunca llamaste, nunca regresaste por mí, no me querías solo fingías y yo sonreía porque estaba ciega, porque yo me conformaba con tus mentiras, me gustaba tu forma de hacerme daño, me gustaba como me ignorabas. Venias, desordenabas mi vida y te ibas, pero estaba bien, porque se suponía que estabas bien sin mí, pero siempre volvías, decías que me echabas de menos y yo te aceptaba, yo te quería, yo cada vez me enamoraba más, hablabas de ella, de su amor y yo lloraba, te odiaba, pero al final del día solo importaba que era a mí a quien le pedías amor, ella no estaba para ti, y eso era todo, eso me hacía feliz, me mataba. Y después solo me jodías, solo me dabas lágrimas, te odie, te odie de la misma forma que te amé, pero después entendí que ya no era amor, que no era odio, solo era costumbre, solo necesitaba seguir creyendo que significabas algo para mí, solo necesitaba sonreír como una loca enferma al pensar que me echabas de menos, solo quería que me quisieras.