Prisionera

Mi nueva extraña vida

No voy a empezar relatando como el típico cliché de 'Cuando desperté estaba en un lugar extraño', porque:

1- Estaba despierta cuando llegué

2- Sabía en donde estaba, o algo así.

Retomando, me subieron a una camioneta blanca, más precisamente en la parte trasera. Me prohibieron mirar el camino, y no pregunté, porque el guardia que me había pasado a recoger a la estación de policía luego de la tragedia daba mucho miedo.

El trayecto hacia mi destino duró bastante, casi dos horas en las cuales estuve mirando hacia abajo por miedo a desobedecer las órdenes del guardia y divagando con mi mente a donde me estaban llevando.

-Tu nuevo hogar-Dijo el guardia, que por cierto estaba empezando a detestar sin motivo. Me permití subir la cabeza para ver por la ventana, allí se encontraba una edificación imponente debido a su tamaño, pero llena de enredaderas, plantas y moho debido a su antigüedad claramente visible. Tenía apariencia de internado psiquiátrico de los 80'

El guardia se bajó del asiento del conductor y se dirigió hacia mi puerta, para luego abrirla y tomarme del brazo haciéndome bajar del auto. En cuanto mis pies tocaron el piso, aferró aún más su agarre como si yo fuese a escapar en algún momento.

Como dije al principio, sabía donde estaba, pero en realidad no lo sabía con claridad. Este era el lugar que se había manifestado en mi sueño, el que había tenido en la estación de policía cuando el cansancio me venció y cerré mis parpados. Pero en mi sueño había algo más, tres chicas vestidas de azul. Me estoy volviendo loca.

Atravesamos la puerta principal y no había rastro de nadie, pero aún así pude notar la gran cantidad de cámaras distribuidas por todas las paredes y techos. El guardia me llevó a rastras por lo que parecieron interminables pasillos, hasta llegar a una puerta, no diferente a las otras.

Tocó la puerta dos veces y se oyó un 'adelante' procedente de una voz femenina. El guardia abrió la puerta y pasamos a lo que parecía ser una oficina, muy impecable y vi a quien sería mi nueva enemiga sentada detrás de un escritorio.

-Retírate- Replicó la mujer. No obstante el guardia se retiró y me dejó a solas con ella.-Siéntate.

Me senté en la silla que había de mi lado del escritorio y ella me miró de una manera muy extraña, como si me analizara, luego prosiguió a hablar.

-Soy la Señora Sierich, la directora de esta institución. Se te asignará una habitación que compartirás con otras tres personas más, en tu caso chicas. Debo avisarte que queda prohibida cualquier tipo de relación amorosa con personas de cualquier sexo, incluida relaciones sexuales, aquí no hay religiones por lo tanto si antes tenías alguna ya no la tienes, siempre debes de tener al descubierto tu cuello y nuca, no me importa cual es tu nombre, pero he de informarte que ya no te llamarás mas como lo hacías antes, ahora se te asignará un número y ese será tu nuevo nombre. Tu nombre será 13. Puedes hacer las cosas fáciles para vos y para mí haciendo caso a todo lo que se te ordene, respondiendo a todas las preguntas y sin intentos de escape. En el caso de que no obedezcas se te castigará severamente, ya estás avisada.

De la nada se abrió la puerta y volvió a entrar el guardia sin darme tiempo para hablar o siquiera procesar lo que me había dicho la Señora Sierich.....