Prisionera

10

La idea de escapar no era tan mala, pero no tenía sentido. No había nada esperándonos afuera, no teníamos familia.

-¿A donde iríamos?- Le pregunté, ese era el gran dilema.

-Podemos arreglárnosla-11

-¿Que va a pasar con los demás huérfanos?- No era moralmente correcto que los dejemos acá.

-Tenes razón, tenemos que esperar a que terminen de llegar- 11 estaba emocionado como Potterhead en parque temático.

-Hay muchas cámaras- Les recordé nuestro mayor problema.

-Tengo una forma de llegar hasta el patio-11

-¿Como?-12

-No se los voy a enseñar ahora, todo a su debido momento, aunque no se si podré llevarlos a todos....-Cada vez hablada más bajo, como si estuviera compartiendo sus pensamientos en voz alta.

En ese momento sonó la alarma que indicaba que debíamos levantarnos para la ducha.

Salí del cuarto y me dirigí directo al baño. Comencé a ducharme, cuando escuché la voz de 12 del otro lado.

-¿Sería correcto que nos bañemos juntos?

-No lo creo.

-Okay.

Hice el mismo proceso de siempre, y cuando terminé me dirigí hacia la sala de las puertas rojas.
Hicieron que me siente, bueno básicamente fue el mismo proceso de siempre. Solo que esta vez identifiqué una de las imágenes. Las cosas que se movían solas. Me pareció similar a lo sucedido en las duchas, cuando las gotas quedaron suspendidas en el aire.
En ese momento el monitor emitió un pitido y la mujer me miró.
-Concluimos los exámenes por hoy.
Anoto algo en una planilla y siguió con su trabajo.
Me pareció extraño, ¿porque había sonado? Y la pregunta más importante ¿Significaba algo bueno o malo?.
Ahora no me tenía que preocupar por eso. Teníamos que conocer a 10.
Y ahí estaba, aquel chico de piel bronceada y ojos color miel.

Nos acercamos y el se sonrojó al ver a 14, es normal, 14 es muy linda.
Nos presentamos y le preguntamos si él era 10
-Supongo que sí- Su voz no era tan grave, pero aún así sonaba muy masculino.
Hicimos un desayuno muy fuera de lo común, solo por el echo de que hoy hablamos fluidamente.