Volverás a leer a ésta pareja que te enamoró y aprendiste a querer desde el principio.
¿Me acompañas en éste segundo viaje de amistad,pasión y amor?.
¿Estás dispuesto a luchar con ellas cada batalla que se interponga?
"-Eres una adulta,¡Maldición!,c...
Después de una semana de haber estado en Francia,decidimos volver a nuestras casas. Al salir del aeropuerto nos subimos al coche y manejamos hacia mi casa. No quería hablar, estaba consciente que fui infiel, pero creo que se lo merecía.Todo éste tiempo me sentí humillada y dejada de lado.No debería sentirme triste pero así soy, una mujer débil en todo sentido. Estuve un rato admirando el cielo gris y cerré los ojos al sentir el coche detenerse. No me había dado cuenta que ya habíamos llegado a mi casa.
—Entonces...bueno aquí te dejo Ana— Comentó Michelle sacándome de mis pensamientos.
La miré y asentí levemente mientras me desabrochaba el cinturón de seguridad.
Me bajé del auto y ella me siguió.Abrió el maletero y quitó mi bolso y la pequeña valija.Me las entregó y luego me abrazó con fuerza.
—Me divertí mucho estos días, agradezco que me hallas invitado —sonrió y se alejó al ver a mi esposa parada en unos de los escalones. —Gracias por haber aceptado mi invitación, fue bonito lo que pasamos allí —bajé la cabeza y luego la miré fijamente —debo irme ya,cuídate —susurré mientras me acercaba a besarle en la mejilla.
Esperé que se metiera al coche y luego me giré al verla.Estaba seria y con los brazos cruzados sobre su pecho. Estaba furiosa y con ganas de llorar, daba igual, ella me lastimó primero. Caminé hacia ella,pero no la abracé, la ignoré y empecé a subir las escaleras. Abrí la puerta y me adentré en la casa. Al no ver a los niños comprobé que estábamos solas.Debíamos hablar pero no me sentía preparada.
—No me ignores Ana,no me ignores carajo —Se quejó Fernanda mientras cerraba la puerta con fuerza.
Me senté en el sillón y froté mis sienes mientras apoyaba los codos en mis rodillas.
—No te hagas la ofendida conmigo, ¿cuál es el problema?,¿te jode que la halla pasado bien?¿te molesta que te halla puesto cuerno?—la miré con ojos llorosos y apreté los dientes —¿Qué hice para que me engañes?—.Comenté angustiada,sintiéndome tan débil. —Ya te pedí disculpas,ya no sé que hacer para que vuelvas a tratarme bien, me equivoqué y lo siento mucho Ana—sollozó y se acercó.Se arrodilló y tomó mis manos con fuerza— te amo y ella no se compara contigo,perdoname ya no aguanto estar así peleadas—.Respondió en voz baja intentando no llorar.
Me acosté en el sillón y la quedé viendo unos par de segundos.
—Quiero pensar que aún eres esa chica de la escuela,de la que me enamoré sin pedir nada a cambio, quiero sentir esa conexión de nuevo.No sé que mierda está pasando en nuestra relación pero quiero arreglar esto, porque te amo y me duele ésta jodida situación— comenté con un nudo en la garganta mientras tomaba su mano.
Sonrió con ojos llorosos y me abrazó con fuerza.
—Vamos a arreglar esto,te lo prometo, y claro que sigo siendo la misma chica de la secundaria, te amo y no quiero separarme de ti,jamás vuelvas a irte tanto tiempo amor— respondió angustiada mientras escondía su rostro en mi cuello.
La rodie con mis brazos y la apreté a mi cuerpo mientras me sentía relajada.
—Tengo algo que contarte—susurré en su oído y me quedó viendo sorprendida.
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