TE AMO AMIGA 2©™

Capítulo 21

Narra Fernanda.

Dos meses después de lo sucedido aquí me encontraba, oyendo de alguna manera la charla que tenía Francisco con su mánager, se movía de un lado a otro en la habitación y me producía mareos.
La cama se volvió fría sin ella,la extraño pero no logro comunicarme, si la llamo no me atiende,y si logro hacerlo solo me pasa al buzón de voz.Tenemos tantas cosas de que hablar que me aterra hacerlo todo sola,¡vamos! ¿les digo la verdad? la necesito en mi vida, porque me equivoqué totalmente con mi tonta decisión.

Si tuviera una ultima oportunidad sería pedirle perdón y hacer lo que sea para tenerla de vuelta.
Me siento solitaria, no hago otra cosa que llorar por todo,y los niños están muy deprimidos porque la extrañan.Ya no sé que hacer para llamar su atención, aún recuerdo lo último que nos dijimos.

Flashback.

Veía que sacaba su ropa del placard y la embocaba en la maleta abierta de par en par.Su ceño estaba fruncido y eso demostraba que estaba dolida, y es verdad que la había jodido para siempre.
Caminé entre la ropa que según ella no le servía y me puse a su lado.

—Por favor no me dejes, te lo pido de corazón —Dije angustiada buscando su mirada que la tenía puesta en el cuello de su camisa blanca.
—¡Se me manchó de café, maldición!—Exclamó enojada,haciendo un bollo a la prenda y tirándola dentro de la valija.
—No hagas eso Ana,no me ignores,yo te quiero mucho —Susurré provocando su mirada llena de odio.
—Tú lo dijiste, me quieres, es algo muy diferente a sentir amor por alguien—tomó mis brazos con fuerza y me sacudió —Ya no quiero verte,no quiero oírte,¡me has dañado Fernanda!—Gritó provocando que cerrara los ojos de miedo,sintiendo un nudo en la garganta.
—Estás ebria y no sabes lo que dices—Respondí sollozando y me soltó.
—Hago lo que se me venga en gana Fernanda, ya no puedes fingir que te importo, ya deja de mandarme—La vi caminar hacia la cama y tomó las mantas para tirarlas al suelo—¡Acuéstate con él!, haz lo que sabes hacer,dañar,dañar ¡y dañar a alguien que te ama con locura!.Pero ya no más, ¡no vas a verme nunca más! —Gritó agitada mientras veía sus lágrimas bajar a borbotones.