-Capitulo 9-

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Caminamos juntos dos cuadras hasta llegar a la casa.

_Esta es la dirección_ comenta Palo.

La puerta de entrada estaba abierta, un pasillo largo nos guiaba a dos escaleras una era la casa de Ezequiel y otra la de sus vecinos.

_ ¿Cuál es? _tenso.

_La de la izquierda_ segura. _Vamos_.

Entramos por el pasillo y empezamos a subir las largas escaleras, un poco asustados.

_ ¿Y si alguien nos ve? _pregunto, inseguro.

_No hay nadie_ responde. _Los vecinos tienen las ventanas cerradas, deben estar descansando_.

_Está bien_.

Palo me pasa la llave, empiezo a probarlas hasta acertar con una de ellas.

_No puedo hacerlo_ me dice, empezando a bajas los escalones.

_Palo, ¿Estás loca? _en voz baja. _No vas a abandonarme ahora_.

_Tengo miedo_ tensa.

_Amiga, estamos juntos en esto_ serio. _Te lo prometo_.

Giro la llave hasta escuchar que la puerta se destraba, giro el picaporte y abro la puerta. Segunda fase: COMPLETA.

_ ¿Ahora es cuando nos dividimos? _pregunta, después de que cerrara la puerta.

_Rápido_ suelto. _No sabemos cuándo pueden volver_.

Nos dividimos, ella buscaba en lo muebles abajo del televisor mientras yo estaba en la habitación de Ezequiel, tratábamos de ser lo más prolijos posibles y no mover tanto las cosas de su lugar. Revisábamos todo, en sus cajones no había nada más que ropa y cosas personales, en su closet tampoco y menos en sus estantes.

_ ¿Dónde estás? _mientras revisaba cajón por cajón. _ ¿Dónde estás? _.

En uno de los cajones encuentro una foto, algo particular y conocida. La llamo a Palo, quien viene corriendo a la habitación.

_Me asustaste_ agitada. _Cómo pasa el tiempo_.

_Como cambiamos_ sonriente. _No nos desviemos, perdón_.

_Es extraño, ¿No?_ tensa.

_ ¿Qué? _sin entenderla.

_Las marcas que hay en la habitación de Eze. En la puerta, en las paredes_ con seriedad.

_Mejor sigamos Palo_.

No quería hablar del tema que casi me cuesta su amistad, Ezequiel no era golpeado por su padre, era sobreprotector. Estás en lo correcto Franco, deja de imaginarte cosas. Guardo la foto en el cajón y ambos seguimos buscando la carpeta.

_Voy a la habitación del papá de Ezequiel_ me dice, pero la tomo del brazo.

_ ¿Estás segura? _tenso.

_No pasa nada_.

Revisamos juntos por un largo rato. No encontrábamos nada y eso nos desesperaba un poco, nos dábamos cuenta que habíamos fallado. Tercera fase: FALLIDA.

_No hay nada_ comenta Palo, después de revisar la ultima caja.

_No puede ser_ dando vueltas. _Algo tiene que haber_.

_Es mejor que nos vayamos amigo_.

_No_ grito, dándole un golpe al placar.

Algo que parecía simular un libro cae, levanto la vista y noto que se había desacomodado del estante. Abro un cajón, me subo en él y llego a alcanzar lo que parecía un libro, pero después de tomarlo noto que era más ligero y con un sticker en medio "Mudanza"

_Lo encontramos_ feliz.

_Es hora_ abriendo la carpeta.

Después de leer un par de hojas, sobre el camión de la mudanza llego a los boletos que estaban asegurados, juntos los leemos y respiramos en paz.

_Ezequiel se muda a Córdoba_.

_Podemos estar tranquilos_ comente Palo.

_No del todo amiga_ serio. _No sabemos si es verdad que va a volver_.

Escuchamos un golpe y voces al mismo tiempo. Voces que se acercaban a la casa. Amos nos miramos y tratamos de hacer en menor ruido posible.

_Son ellos_ suelta Palo.

En aquellos últimos minutos, Palo se trepa al placar de Gregorio para acomodar la carpeta mientras yo guardaba las cajas en su lugar. Cierro el closet y le chequeamos por última vez los cuartos de la casa.

_ ¿Qué haces? _ me susurra Palo.

_Dejame ver_.

Miro por el hueco del picaporte, se estaban ayudando a subir unas cajas, todavía no estaban en la puerta. Tomo las llaves y les doy un giro trabando la puerta. Iba a ser sospechoso si la encontraban sin seguro.

_Tenemos que irnos, ahora_ después de llegar a ella.

_La ventana del balcón_ suelta.

_Vamos_.

Salimos por el balcón y la cerramos con su seguro, debajo había pasto. No iba a ser una caída dolorosa, un metro de altura.

_Podemos hacerlo_ tomándole la mano.

_Tengo miedo amigo_ apretándome. _No puedo saltar.

_No te sueltes Palo_ tenso. _Es nuestra única salida_.

Nos tomamos del barandal y a la cuenta de tres pegamos un salto, hasta caer en el pasto, nos limpiamos y acomodamos y empezamos a caminar.

_Vamos_ después de escuchar la puerta.

_Mi collar_ tocándose el cuello. _No lo tengo_.

_Nos tenemos que ir amiga_ apurándola.

_No está Fran_.

La levanto y empezamos a correr hasta la parada de colectivo.

_ ¿Estás loco Fran? _soltándome. _Mi collar está en la casa de Ezequiel_.

_Perdón, nos teníamos que ir si o si_ agitado. _No te preocupes, seguro te lo olvidaste en tu casa_.

SIN SALIDA 3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora