-Capitulo 14-

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-Viernes, Abril-

-Ezequiel-

Doy una última vuelta, sabía que no iba a volver a esta casa. Había vivido muchas cosas buenas y malas. Las marcas en la puerta y paredes seguían presentes, me traían recuerdos que nunca voy a olvidar, pero prefería hacerlos. Siento un dolor en mi estomago, sabía la verdad este era el adiós.

Haber convencido a la directora para que dejara salir a los chicos para despedirme fue algo que nunca voy a poder agradecer. Hoy Viernes dejaría mi casa, mi escuela. Dejaría Buenos Aires y empezaría una nueva vida en otra provincia. Una nueva etapa que no me convencía mucho.

_Llegamos_ me dice mi tío, después de frenar el coche.

_Te espero en la esquina_ comenta mi papá.

_Gracias_ con una sonrisa leve.

_Hijo_ me detiene. _Espero que este sea un nuevo comienzo para los dos_.

_Yo también espero lo mismo_ antes de bajarme.

_Te quiero_ sincero. _No tardes mucho_.

Me bajo del auto, algo shockeado, que era todo esto que estaba pasando. Le estaba empezando a ver el lado positivo a la mudanza. Una nueva etapa que no me convencía mucho, pero ahora empezaba a convencerme. La relación con mi papá había cambiado hace tiempo, no recuerdo cuando fue la última vez que sentí sus manos sobre mi cuerpo.

La mayoría de mis compañeros me abrazaban, me saludaban con un: "Buen viaje" "Que tengas un buen comienzo" "Suerte" Pero tenía a algunas personas que se habían quedado.

_Dai_ abrazándola. _Vos me enseñaste muchas cosas, me apoyaste en todas mis decisiones y siempre estabas para hacerme reír_.

_Sos incondicional para mí_ sonriente. _Espero que tengas un buen comienzo_.

_Te quiero muchísimo_.

Después ella vuelve al colegio, paso a la siguiente persona que fue una persona muy importante y siempre lo va a seguir siendo.

_Hola_ me saluda Mili, tensa.

_Pasamos los mejores momentos juntos_ con una gran sonrisa. _Lamento mucho que nuestra relación haya terminado de la peor manera_.

_Me hiciste pasar momentos hermosos_ dándome un último bezo.

_Espero que tus sueños se te hagan realidad. Gracias_.

Me abraza, un largo rato y después vuelve al salón. Estaba angustiada y la entendía.

_Palo_ sonriente. _Todo lo que tengo para decirte, ya lo sabes. Parece que fue ayer cuando te conocí con esos rulos y tu flequillo loco, nunca cambió. Gracias por cambiarme, enseñarme cosas que nunca aprendí por la falta de mi mamá. No te quiero perder nunca_.

_Siempre voy a estar para vos_ contenta. _Fuiste una de las mejores personas que conocí. Nunca te rindas_.

_Te voy a extrañar_ dándole un abrazo.

Lo último que me quedaba, era la despedida más difícil. Pero tenía que hacerlo, no me quedaba otra. Seguía sintiéndome culpable. Como no le pude contar la verdad de mi papá a el que siempre estuvo para mí. Porque sabía cuáles iban a ser las consecuencias. Liberar al monstruo.

_Bueno_ me dice, tenso. _Solo somos vos y yo_.

_No empeces_ entre risas. _Esto es muy difícil para mí_.

Se ríe.

_El campo de deportes, que día_ empiezo. _Es algo que nunca voy a olvidar amigo, no sabía lo que hacía y ahora que me doy cuenta de todo. No merezco tu amistad_.

_Por favor_ con lágrimas en los ojos.

_Pero me abriste los ojos, me cambiaste como persona_ sincero. _Tenemos diferentes gustos, pero nos entendemos y apoyamos siempre_.

Nos abrazamos, como si fuese el último. Era el último, por un largo tiempo. Quizás años.

_Siempre juntos hermano_ sonriente.

_Siempre_ respondo.

Este era nuestro final y el comienzo de una nueva etapa. Mi tío manejaba hacia el aeropuerto, mi papá y yo estábamos felices, lo único que queríamos era subir al avión, podíamos ver a los aviones pasar u otros vuelos despegando.

Estábamos contentos por esta nueva etapa, era difícil de aceptar pero al verlo a los ojos podía notar que esta mudanza era mi única salida.

SIN SALIDA 3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora