Opuestos

Capitulo uno.

Napa, California.

No soy esa clase de chica a la cual le gusta salir a bailar. No me gusta esos tipos de lugares, no me hacen sentir a gusto. Definitivamete no es lo mio, prefiero quedarme en casa leyendo, viendo alguna serie o película, o es mas.... jugando a juegos de internet. Si, así de divertida soy. Bravo por mi.

Mis amigas, que son solo dos, saben que no soy de ese tipo de chicas, que no soy como ellas que si aman la noche como cualquier adolescente. Lo saben y lo respetan, pero me insistieron mucho en ir a la fiesta que iba a dar Hilary, una porrista de la escuela. No es la típica porrista que se ven en las películas, esa que se cree que el ser popular lo es todo y por eso se lleva el mundo por delante. No, Hilary no es así, es popular, si. Y es muy atractiva, todos quieren con ella. Es amable, y simpatica, muy agradable. La popularidad no se le subió a la cabeza, como dicen por ahí. Hoy es su cumpleaños, por eso la fiesta.

A mi y a mis amigas, nos invito mientras almorzábamos en el instituto. Al darme su invitación, agrego "Por favor, ven. Seria muy sorpresivo y agradable verte ahí" 

Estaba por no ir, pero como ya dije, mis amigas insistieron. 

Se estaban preparando para la fiesta, yo seguía luciendo como una chica de casa aun.

-¿No es muy temprano para que te prepares? - Le pregunto a Kate quien se alizaba el pelo. Y es que lo era, la fiesta empezaba a las diez, y el reloj marcaba a penas las ocho.

-Ya sabes como es de rebelde mi pelo, Nina. Necesita su tiempo para quedar perfecto-me contesto Kate.  

Kate tenia el cabello oscuro ondulado hasta por debajo de los hombros, del cual siempre se quejaba, aun mas cuando había humedad. Sus ojos eran color café, los cuales los acompañaba con unas hermosas pestañas largas "La envidia de toda chica" decía ella, y al parecer así era. Cuando sonreía se le hacían oyuelos, ella los odiaba, pero las demás personas eso amaban. Y en verdad, se ve aun mas hermosa cuando sonríe.

-Pero si luces bien-le digo. 

Se da la vuelta dándole la espalda al espejo - ¿Bien? Bien luciría si iríamos a una fiesta de disfraces y diría que soy Mufasa- Me saca la lengua y vuelve a su trabajo. Me rió de ello.

-¿Tu que haces? -le pregunto a Angela que estaba mirando tres prendas de ropa sobre mi cama. Angela es rubia, de pelo lacio, no hace falta decir que Kate envidiaba esa parte. Sus ojos son verdes, y tiene los labios algo turgentes. ¿Cuerpo de modelo? Si lo tenia. Ganaba mucho entre los chicos, de hecho Kate también. Eran realmente hermosas, yo me sentía opacada al lado de ellas, pero las amo y ellas me hacen sentir especial.

-¿Cual dices que me quedara mejor?

-¿A ti? Todos

Sonríe.

-Ven, Nina, dime.

Me levanto de la silla frente a la computadora que reproducía musica "de fiesta" en estos momentos escuchábamos a Rihanna. Miro los diferentes atuendos que se trajo, y trato de imaginarla en cada uno, y fui sincera. Todos le quedarían geniales, pero ella quería ayuda, una opción, así que la di.

-Creo que lucirías estupenda con el vestido negro, de seguro te marcara las curvas y ya sabes, todos locos-le sonrió.

-Eres tan linda-me abraza- La abrazo también- ¿Y tu que te pondrás?-me pregunta.

-Yo... eh.... no lo se.

-¿Tienes algo de noche? Si no traje -Dice Kate

-Algo. Mi madre me compro algunas cosas estos días cuando le dije que saldría.