Capitulo diecisiete

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Esa noche había soñado con Damon, con la diferencia que esta vez no me puse de mal humor. Me sentía extraña, "pues te gusta" me acuso mi conciencia, y nuevamente la ignore. Era algo absurdo. 

Me encontraba esperando a Kate y Ángela, mi madre y Ryan ya se habían ido. Cuando escucho el claxon de Ángela salgo y me dirijo a su auto, una vez que subo comenzamos a bombardearnos con preguntas, ellas a mi y yo a ellas, ambas se veían felices, Bryan y Nick estaban haciendo un buen trabajo, espero que dure. Ángela estaba calmada en cuanto a su malestar con Damon, comenzaba agradarle, y a Kate, bueno a Kate nunca le desagrado. Llegamos al instituto y me mentalice para enfrentarme a las miradas de odio de algunas chicas, y la de Laura particularmente.

Entramos al instituto y a mitad de camino alguien me abraza por detrás, pienso que es Luc pero los rostros de Ángela y Kate me dieron a entender que no era el. Mis pies estuvieron en el aire unos segundos, aun no sabia quien me alzo así, hasta que toque el suelo y me voltee. Damon sonreía con frescura, le devuelvo la sonrisa.

- ¿Como estas, preciosa?-parece no notar a mis amigas. Solo me miraba a mi.

- Bien y ¿tu?-le doy un golpe leve con el puño cerrado en su pecho.

- Ahora que mis ojos te ven, mucho mejor-sonríe. Kate se aclara la garganta para captar su atención, cuando la mira ella y Ángela sonreían- Hola chicas

El timbre suena: -Nos vemos en el comedor, Nina-se despiden de mi mis amigas, y me dirijo a mi locker para buscar mis cosas para Literatura. Damon me seguía.

- ¿Eres una especie de perrito?

Se ríe.

- No, solo quiero mirarte-me sonrojo y el sonríe feliz. Le encantaba ponerme así. 

Cuando nos dirigíamos al salón, poso su brazo a través de mis hombros. Los ojos de los estudiantes, nuevamente, estaban en nosotros. Algunos sorpresivos, otros como si nada pasara y otras miradas, de las chicas, con desprecio hacia mi. Damon llevaba una sonrisa en su rostro ignorando todas esas miradas, así que decido ignorarlas también. Una vez en el salón nos ubicamos, y mientras esperábamos por el señor Cavanaugh nos pusimos a jugar al ta-te-ti, parecíamos niños riéndonos. Le estaba ganado 4 a 1.

- Eres pésimo-me río.

- Apuesto a que tu serias pésima en la play-se cruza de brazos y alza una ceja.

- ¿Quieres probar?-imito su posición y sonríe.

- Me encantaría-me mira unos segundos sin decir nada- A decir verdad, me encantaría probar otra cosa-mira mis labios y otra vez mis mejillas arden. "Te gusta, te gusta" se burla mi interior. Vuelve a mirarme y sonríe. Le sonrío tímidamente y el señor Cavanaugh entra al salón saludando a la clase. 

Damon presto atención a la clase, hasta me sorprendió que cuando se hacia una pregunta el contestaba, el señor Cavanaugh me miro: -Excelente tutoría, señorita Downey. Miro a Damon quien me sonríe y le devuelvo la sonrisa.

El timbre de finalización de clases llama, Damon quería que nos saltáramos la siguiente clase.

- Anda, comete un delito escolar

Me río: -En serio que no puedo, los exámenes se aproximan y tengo que estar al tanto de las clases.

Suspira algo desilusionado.

- Esta bien-sonríe de una forma que mis piernas tiemblan. Oh, mierda. Mi consciencia se ríe. - ¿Almorzamos juntos?-llevaba las manos en los bolsillos del vaquero, lucia tierno mirando hacia el suelo y balanseandose. Sonrío viéndolo.

- Almorzamos juntos -le confirmo y me sonríe. Nos despedimos y me dirijo al salón de Biología, Luc ya estaba ahí, como de costumbre sonrió al verme. La clase transcurrió lenta, tranquila y divertida por parte de la señorita Gomez, lo cual sus bromas no hizo que la clase sea muy pesada. Nos da los temas del examen, que seria dentro de dos semanas y luego de esto, el timbre suena: Hora se almorzar con Damon. 

Cuando miro hacia la puerta, el se encontraba apoyado sonriéndome, niego con la cabeza sonriendo. Luc lo mira y me mira.

- ¿Que hay entre ustedes?-pregunta.

- Nada... solo... amigos-asiente- ¿Ocurre algo?

- No quiero que salgas lastimada.

- Tranquilo, Luc. No pasara. No llegaremos a nada - "mentirosa, quieres llegar a algo" Bien, tengo que hacer algo con esa molesta voz en mi cabeza- Solo amigos-sonrío y el asiente. 

Cuando me reencuentro con Damon, Luc se limita a mirarlo y me sonríe como señal de "Hasta luego"

- Hola-le digo.

- Hola, preciosa-sonríe- ¿Vamos? -me extiende la mano para que la una con la mía y hago un gesto mirando alrededor- Es verdad, no es una buena idea-se encoge de hombros.

Nos dirigimos al comedor para elegir nuestro menú, cuando veo a Ángela y Kate les hago señas de que almorzare con Damon y ambas me dieron el OK sonriendo. 

Nos estábamos dirigiendo afuera, a nuestra mesa donde habíamos estudiado una vez, cuando Laura se pone en nuestro camino, me ignora por completo.

- No me has llamado-suena molesta, y posaba molesta cruzada de brazos.

- Estuve ocupado 

Laura me mira y se ríe, Damon frunció el seño: ¿Cual es la risa? -pregunta.

- Oh, vamos. ¿Ella? -me rebaja con la mirada- ¿En serio? -se ríe nuevamente- La pequeña princesa virgen no te dará lo que a ti te gusta-la mano de Laura se deposita en el hombro de Damon- Yo si-sonríe coqueteando. Damon hace un leve movimiento para sacar su mano.

- No la llames así, y no la mires de esa forma. Ya déjala en paz-me mira y yo solo me limito a mirar al suelo. Quiero correr hacia mis amigas que miraban la escena con enojo- Ella me esta dando una atención diferente a la que tu me dabas-la esquiva y sigue caminando. Laura me mira con odio al ver que por mi la dejo "mal parada" frente a todos. 

- Nina, ven...-me llama y por impulso propio voy hacia donde el esta. No dijimos nada hasta llegar a nuestra mesa- No quiero que le hagas caso-lo miro.  Me sorprendió un poco su reacción hacia Laura.

- Damon, ¿puedo confiar en ti?-mi voz se quiebra.

- Quiero que confíes en mi. Se que soy un desastre para ti, que me tienes mal visto por como soy con las mujeres. Pero tu.... tu eres diferente. Me haces sentir diferente-asiento y toca mi rostro acariciándolo, le sonrío para tranquilizarlo y comenzamos a comer. Me sentía totalmente extraña, me sentía bien con el siendo así, pero a la vez su otra parte, la del ser mujeriego me llenaba de miedo. ¿Por que me llena de miedo si solo somos amigos? "Porque te gusta" me contesta ella, mi consciencia, otra vez. Creo que tiene razón, creo.

La hora del almuerzo fue buena, nos reímos como solíamos hacerlo, hablábamos de cosas particulares de ambos. Logre olvidarme de lo que paso en el comedor. 

El timbre suena, tendríamos que ir a nuestra ultima clase.

- Cada vez me siento mas cómodo contigo-me dice sonriendo.

- Debo admitir que yo también

- ¿Salimos el sábado?

Oh no.

- Eh... no puedo-frunzo el seño- Tengo planes.

- ¿Con Kate y Ángela?- ¿miento? No, soy pésima mintiendo. Niego con la cabeza y se cruza de brazos- ¿Un chico?-asiento- ¿Planea robarme?-alza ambas cejas. ¿Esta molesto? "Celoso" contesta mi interior.

- ¿Que?-me río- Oye, no soy un objeto. No soy tuya

- Pues lo seras-me sonríe- Y dile a tu amigo que tiene competencia, y muy buena -posa como un sex symbol.

- Oh mierda, tu ego llega a las nubes-ambos reímos- Debo ir a clases

- Yo igual. Y no me gusta que salgas con otro-no me deja contestarle. Cuando lo estoy por hacer se va prácticamente corriendo. ¿Que fue eso? ¿Estaba molesto? Oh, vamos. Tu eres el mujeriego aqui.

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