Opuestos

Capitulo cuarenta y tres.

Las cosas se me vinieron encima.

La culpa y el dolor iban de la mano, me estaba odiando. Estaba odiando la persona que fui con el. Pero aun así... la palabra "creerle" no llegaba a mi. Estaba completamente cegada, completamente perdida. Completamente sola en un callejón sin salida, oscuro, frío, y vacío. Solo estaba yo, junto a mis malditos sentimientos, de dolor y culpa. Mirase a donde mirase no había salida.  Podía gritar, pero ¿alguien me escuchaba? Ni siquiera mi "yo" interior estaba presente. Se había esfumado, y estaba perdida. Las palabras de mis amigos volaban en mi cabeza sin sentido alguno. Solo me recordaban el error que había cometido, el error que me iba a ser infeliz cuando el puede hacerme feliz. Pero... ¿por que aun así no puedo confiar? ¿Creer? Me desconozco.

Soy nueva en esto. No se que hacer, no se como seguir. No se como pude perder a la persona que amo.  

Prefiero sentir dolor y culpa a no sentir nada. Al menos así se que todo es real, que el fue de verdad y que lo perdí. Y aun sabiéndolo no hacia nada.

Había pasado una semana de la ultima vez que lo vi. Una semana mas sin el. No había asistido al instituto, estaba en la casa de mi padre. Estaba muy abrumada por todo y quería un respiro. Damon no me había llamado, ni yo a el. Mis amigas me contaban que no quería hablar con nadie, ni siquiera con Emmett. Lo veían perdido, solo y triste. "Tienes que volver, y tienen que volver" me decía Ángela, y Kate "No pueden seguir así, no pueden dejar que la oscuridad los consuma por completo. Están a tiempo"

No, Kate. Ya no había tiempo, no lo sentía así.  Luego de mucho pensar y de las muchas insistencias por mis amigos, mi madre, y Ryan para que vuelva a casa, volví.

- Gracias por traerme -miro al hombre que estaba en el lado del conductor, con su rostro sin afeitar hace dos días, sus ojos azules escondidos tras unas gafas y un despeinado cabello castaño: mi padre.

- Nina, antes de que bajes, ¿puedo decirte algo? -asiento- No dejes ir al amor que alguna vez te lleno, y te completo. No permitas que se vaya la sensación de sentirte amada por alguien que te ve única, hija -mis ojos se cristalizan- Se que con tu madre cometí muchos errores, pero en su momento yo la ame, y ella me amo mas. Pero merecía algo mejor. Por suerte ahora vuelvo a sentirme único para alguien, y tu para alguien eres única -seca mis lágrimas con sus finos dedos- Quiero que seas feliz -suspira- en tu cumpleaños así estabas cuando me hablaste de ese chico. Recupera esa felicidad

- Te amo, papa -lo abrazo

- Y yo a ti, mi niña

**

Cuando vuelvo al instituto, no solo me invaden las tareas escolares perdidas, si no que también las preguntas de mis amigos, los abrazos y mas abrazos. Pero yo solo tenia una pregunta en mente, ¿Donde esta el?

Miraba alrededor de mis amigos, pero no lo veía.

- No asistió hoy -me contesta Ángela y asiento.

- En realidad parece como si esta semana no hubiera asistido -agrega Kate- Estaba pero a la vez... no -Kate me abraza.

Le pregunte a Emmett sobre el, pero solo me pudo decir que no quería hablar con nadie, y que estaba bien así.

Las miradas de mis amigos me decían "recupéralo y recupérense".

- Tengo que hablar con el director -digo evitando esas miradas- sobre el concurso de la semana próxima -suspiro.

- ¿Tu cabeza podrá con los números? -pregunta Will.

- Tengo que poder. Es mi obligación asistir -dicho esto me dirijo al despacho del señor Meyer. Una vez allí llamo a la puerta y tras un "adelante" paso.