Transformantes

Capítulo 22

Primero que todo, ¡FELIZ AÑO NUEVO!🎉🎉🙌

Ahora sí, el capítulo💁

Éramos martes por la tarde y Taylor se encontraba a mi habitación evitando a Damian. Estaba estirada en mi cama con un pie encima del otro y las manos bajo su cabeza.

- ¿Porque todos tenéis que invadir mi cama? Siempre me toca la silla :(

-Creo que no quiero saber lo que quieres decir con "Todos".

- Oh, vamos, yo lo decía por las amigas que invitó pero lo has hecho sonar como si cada noche fuera metiendo tíos en mi cama.

- ¿Tíos buenos o tíos malos?

- Supongo que malotes. Un momento, deja de distraerme y molestarme.

- Destrozas mi kokoro

- Cállate pelivioleta.

- Deja de inventarte palabras, ¿Quieres?

- No, no quiero. Sabes que tienes un cuarto, ¿Verdad? Creo que allí estarías tan bien como aquí, quizá más.

- Damian podría ir a verme por la ventana como si todo fueran flores y arco iris y no puedo tirarlo al suelo cuando suba. Además, si no me perdería estas fantásticas conversaciones que tenemos.

- Ja ja. Por cierto, DK dijo que vendría en 10 minutos y ya han pasado 20.

Como si hubiera estado escuchando detrás de la puerta para hacer una aparición dramática, DK entró en la habitación.

- Hablando del rey de Roma- Murmuró Taylor.

DK se acercó a mí y me tiró de la silla para sentarse él.

- ¿En serio? ¿Ni la silla puedo tener? Sois unos hijos de...

Mis palabras quedaron cortadas cuando DK me puso una mano sobre mi boca. Estaba riéndose y Taylor nos miraba negando con la cabeza. Se levantó y fue a buscar otra silla que puso al lado de mi silla.

- Podrías haber hecho eso des del principio, ¿Sabes?

- No habría sido tan divertido- Aseguró.

Me senté y me empecé a tocarme las muñecas.

- ¿Cómo lo llevas?- Le preguntó DK a Taylor.

- ¿Lo de que mi novio esté relacionado con unos asesinos y tenga un cuchillo hecho de sangre? Oh genial, Ya sabes, algo que toda chica pasa a su adolescencia.

- Voy a buscarle helado antes de que se ponga más borde- Bajé a la cocina, Cogí una tarrina y tres cuchara grandes y volví a subir. No pude ni llegar a mi silla antes de que Taylor coja la tarrina y una cuchara y empiece a comer.

- Oye, yo también quiero- Me quejé.

- Yo soy a la que el novio le ha apuñalado por la espalda así que es mío.

- Ladrona de helados- Le acusó DK y reí.

Cuando se fueron empecé con el estúpido... digo hermoso trabajo de literatura. Probablemente estuve hasta demasiado tarde porque por la mañana, para despertarme, Lisa tuvo que tirarme de la cama. Gruñí al notar el tacto del suelo contra mi piel. Iba a hacer unas normas en esta habitación:

1. No invadir mi cama

2. No tirarme al suelo

Ni que fueran tan difíciles de cumplir.

En clase creo que me dormí algunas veces pero por suerte me desperté a tiempo para que no me pillaran. Para la hora de comer ya me encontraba más despierta. Como siempre Alexia estaba sentada en la mesa. Cogí una bandeja y me senté a su lado.