Capítulo 26

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- Llevas la chaqueta en la mano

Miré la chaqueta que reposaba en mi brazo antes de mirarlo a Chris. Empezamos a caminar.

- Por supuesto, es verano.

- Ya te la pondrás luego- Aseguró

- ¿Por qué es tan importante?

Sonrió de oreja a oreja antes de responder.

- Porqué es mi chaqueta.

- Claro ahora todo cobra sentido. Pero en serio, ¿Me la vas a hacer llevar en cada cita?

Su sonrisa se hizo más grande.

- Definitivamente sí, aunque eso va a dificultar elegir sitio porqué tendrá que ser frío.

- Estoy empezando a pensar que me la dejaste a propósito para hacer esto.

- Quizá

Llegamos delante de un gran edificio y abrió las puertas. Vi lo que parecía un gran pabellón. Me guio hacia la pista, entonces me di cuenta para qué era lo de ir abrigada.

-¿Pero qué...? ¿Cómo?

- Lo abren en invierno y en verano porqué hace calor así que la gente viene aquí a quitarse la calor de encima, por así decirlo.

Y que lo digas. Sí que debía quitar el calor de golpe. La pista había sido helada por completo y agradecí poder ponerme la chaqueta porqué allí dentro hacía bastante frío.

- Esto es increíble, pero no sé patinar- Aseguré

Sonrió- Con eso contaba.

Fuimos a cambiarnos los zapatos por los patines.

- ¿Qué talla necesitas?- Me preguntó.

- 39

- ¿Ves? Ya se algo más de tú.

Me reí- Es tan necesario. Seguro que tu usas un 68, no espera, un 90.

Se rió y me ayudó a colocarme los patines y a ajustarlos. Fuimos a la pista y tuve que cogerme de la barandilla para no caerme y comerme el suelo de una forma muy patética.

Chris me cogió las manos y me alejó de la barandilla. Estaba claro que él tenía mucha práctica. Estábamos en medio de la pista y sus manos era lo único que me sostenía.

- ¿Cómo has hecho todo esto?

- ¿Te refieres a cómo he conseguido la pista para los dos? Digamos que un amigo me debía un favor. Ahora voy a enseñarte a patinar por tu cuenta.

Empezó a explicarme como debía hacerlo y pacientemente fue ayudándome. Cuando pude patinar mínimamente me dejó ir.

- Se te da bien.

- Soy una buena alumna- Dije orgullosa.

Cuando pude ver que lo podía hacer por mi cuenta me fui hacia él y patinamos alrededor de la pista cogidos de la mano.

- Se te nota. Creí que esto sería mejor cita que ir a un bar o algo así.

- Lo es, apesto en eso de sentarme con alguien e intentar no convertir la conversación incómoda o algo así. Además no entiendo porque la gente va a comer en las citas- Chris rió- Mi teoría es que lo hacen porque si se quedan sin nada que decir y hay un silencio incomodo se ponen a comer para disimilarlo.

-Me fiaré de tu palabra, tú eres la experta.

- ¿Yeso que significa?- Pregunté medio riéndome- Da igual. Así que, ¿Siempre has vivido aquí?

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