𝐓𝐇𝐄 𝐆𝐀𝐌𝐄 | 𝐋𝐢𝐛𝐫𝐨 #𝟏 𝐒𝐞𝐫𝐢𝐞: 𝐁𝐄𝐆𝐈𝐍 𝐀𝐆𝐀𝐈𝐍.
SIN EDITAR.
« Y es que este es un juego con fecha de expiración. Un juego en donde el tira y afloja toman el papel fundamental, en donde ninguno de los dos está dispuesto a r...
'Cuando me confundiste de formas impensables, sin ser capaz de comprender mis pensamientos...'
Lunes 18, Abril. Nueva York, Estados Unidos.
Subimos al elevador en silencio, ubicándome un par de pasos más adelantes de Justin y dándole la espalda.
Nos encontrábamos en un silencio que se podría denominar tenso e incómodo, seguramente nuestra conversación anterior los había dejado algo confundidos.
-¿Se conocen? -cuestionó James sin andarse con estribos.
Mordí mi labio inferior y pensé en una respuesta un tanto esquiva, sin embargo no fue necesario ya que Justin comentó un seco-: Si.
-¿Cómo? -el ceño de Cooper se frunció con curiosidad y confusión.
-¿Hablaron con su padre? -el tono de aquel hombre demandante e intimidante se volvió serio y duro, dando a entender que no seguiría con aquel pequeño interrogatorio que ciertamente no había superado las dos preguntas.
Los hermanos comenzaron a hablar de cifras y nombres como si fuera algo totalmente normal, Justin asentía como si estuviera tomando nota mental y antes de llegar al primer piso, se detuvieron.
-¿Para cuándo tendrán listo todo esto? -Emma estaba con el ceño fruncido sin entender nada de lo que salía de sus bocas.
-Debemos leerlo esta tarde, para que papá hable con el suyo -respondió Cooper.
El elevador produjo un pequeño sonido dando a entender que habíamos llegado a nuestro destino, quitándole la oportunidad de seguir hablando a aquel hombre.
-Nos vemos -se despidió Justin cuando nos bajamos, los hermanos se despidieron con educación y cuando iba a decir algo, el empresario volvió a hablar-. Espero verla pronto, Abigail.
Un destello de diversión brilló en sus ojos cuando notó que mordí mi labio inferior reteniendo un suspiro de exasperación, sin embargo respondí-: Adiós, Señor Bieber.
Antes de que volviera a decir algo, me encaminé a paso rápido fuera de la empresa, queriendo desaparecer lo más rápido posible. El ambiente que se desprendía en aquel lugar era desesperante, todos corriendo de un lado para otro como si fueran a ser despedidos en cualquier minuto.
{...}
Estábamos en el departamento que compartían Cooper y James, el cual era realmente bonito y ordenado como para que ellos fueran los dueños. Era bastante sofisticado, tanto que daba la impresión de que alguien los había ayudado a decorarlo, porque si no era así, tenían un gusto fantástico.
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