THE GAME © {#1 Begin Again Series}

CAPITULO XLIII.

« I need your love to guide me back home

When I'm with you, I'm never alone

I need to feel you, feel you, tonight

I need to tell you that it's alright »

-Never Be, 5 Seconds Of Summer.

'Finalmente hicimos un trato que esperaba cumplir al pie de la letra'

Viernes 19, Mayo.
Nueva York, Estados Unidos.

- Este fin de semana será grandioso -la voz emocionada de Emma se apodera de la estancia y luego la veo entrar en el cuarto con una gran sonrisa pintada en el rostro.

- Y habrá tanto alcohol como para olvidarse de todo -mascullo, buscando el traje de baño que me pondría.

Finalmente me decido por uno negro de dos piezas; es bastante simple y normal, sin embargo lo que más me agradaba era que no corría el riesgo de que algo se viera.

- Vamos a hacer esto -siento las manos de mi amiga sobre mis hombros girándome, quedando frente a frente-: no pensarás en ese pedazo de imbécil, al menos mientras estemos en casa de Max. Vas a disfrutar estos días alejada, y en cuanto volvamos, podrás odiarlo todo lo que quieras, ¿vale?

Una sonrisa se desliza por la comisura de sus labios en cuanto me ve asentir, y sin darme oportunidad a hacer algo más, arroja la vestimenta que tengo sobre la cama y me obliga a meterme al baño-: ¡Ahora arréglate o terminaremos llegando tarde por tu culpa!

Ruedo los ojos y me pongo el top azul que llega sobre mi ombligo, el short negro rasgado, y me calzo en las sandalias negras. Tomo mi cabello en una coleta suelta y desarmada sabiendo que el viento de la playa lo desordenaría, y dejo sobre el un par de lentes de sol. Guardo en mi bolso lo que podría necesitar que estuviera en el baño y salgo a la habitación en cuanto estoy lista.

Doblo el cardigan de verano que he dejado sobre la cama y lo meto junto a todas las demás cosas, el pijama y una muda para mañana.

Cuando me he asegurado que tengo todo, voy a la sala encontrándome con una Emma sin maquillaje, vistiendo unos shorts claros, un top rosado pastel y unas sandalias blancas. Su pelo castaño está suelto, y está usando unos lentes.

Luego de lo sucedido con Justin estoy más que segura que no quiero volverlo a ver, al menos por ahora. Este fin de semana me encargaré de disfrutarlo al máximo y no tengo ni la más mínima intención de pensar en él. He ignorado sus llamadas y gran parte de sus mensajes, ni siquiera dignándome a leerlos. Durante toda esta semana había intentado evadirlo todo lo posible y ciertamente lo logré. Estuvimos saliendo con los chicos, conociendo un poco más la cuidad o simplemente conociéndonos entre nosotros.

Son casi las diez, por lo que desayunamos con tranquilidad. En cuanto hemos terminado, abandonamos el departamento dejando todo cerrado y buscamos el auto de Cooper. Le habíamos dicho que podríamos tomar un taxi, pero él dijo que nos saldría más dinero de lo que pensábamos ya que era en The Hamptons. No pude evitar sentirme sorprendida ante la mención de aquel sitio; son varios lugares al este de Long Island, y es bien conocido por ser el lugar de vacaciones para los estadounidenses ricos. Es un lugar campestre, y en el área East Hampton viven los millonarios. Tienen zonas para jugar polo, clubes de golf y se celebran carreras de caballos.