THE GAME © {#1 Begin Again Series}

CAPITULO XXXIX.

« So I'll get the lights and you lock the doors

We ain't leaving this room 'til we both feel more

Don't walk away, don't roll your eyes

They say love is pain

Well, darling, let's hurt tonight »

-Let's Hurt Tonight, One Republic.

'El día en que finalmente comprendí porqué no podías darme más que ese miserable algo...'

Jueves 4, Mayo.
Nueva York, Estados Unidos.

Estoy apunto de caer dormida con la primera elección; "3 Metros sobre el Cielo". Nunca entenderé la locura y el amor desenfrenado hacia aquella película. La vi una vez en mi vida, y realmente, no entendí absolutamente nada. Tampoco es como si llamara mi atención, así que no puse demasiado esfuerzo en entenderla esta vez. Ignoro la cantidad de comentarios obscenos de parte de Steph y Emma, quienes no dejan de repetir que Mario está como quiere. Estoy segura que quedaré bizca en cualquier momento, he perdido la cuenta de cuántas veces he rodado los ojos.

Creo que el sueño ha nublado completamente mi mente cuando "10 Things I hate about you" es la que sigue. Nuevamente, la primera vez que la vi fue suficiente para mí, y tener que repetir aquellas casi dos horas en lo mismo, eran otra vez una pérdida de mi valioso tiempo durmiendo.

Al ver el comienzo de "17 Again", todo rastro de cansancio desaparece y me encuentro embelesada con el mismito Zac Efron -que está como quiere-. Puedo jurar que he estado tan concentrada viéndolo y admirándolo, que no he prestado ni la más mínima atención. Estoy casi babeando ante su perfecto rostro, y qué decir de su cuerpo...

"Magic Mike" aparece en la pantalla frente a nosotras, y creo que ahora sí caeré muerta. Nos quedamos pasmadas viendo a la exquisitez de Channing Tatum y me encuentro envidiando la suerte que tiene Jenna al ser compañera de aquel hombre.

Suelto un bufido de decepción cuando "Crepúsculo" invade mi visión, y comienzo a maldecir al escuchar los chillidos emocionados de las chicas junto a mí. Realmente, odiaba esta película. Nunca me interesó verla, y ciertamente nunca lo hará. Sin embargo, habían momentos en los que era lo único que había en la televisión y recuerdo haberle querido dar una oportunidad, luego de casi cinco minutos estuve apunto de romper el televisor.

Veo la hora en mi celular y me sorprendo al ver que son casi las cuatro de la mañana, no pensé que sería tan tarde considerando que llegamos temprano al hotel.

Pierdo el tiempo hablando por mensaje en el grupo que tenemos con los chicos, y reviso mis redes sociales de vez en cuando. Paso por alto los mensajes de Justin luego de dejarlos en visto y bloqueo el aparato cuando me doy cuenta que una nueva película está por comenzar.

Cuando noto que es la que estaba esperando, pongo toda mi atención a las imágenes y en los diálogos, ahogándome con la risa que me invade en las distintas escenas. Lleno mi boca de palomitas de maíz y bebida, las cuales casi salen volando de ella en variadas ocasiones.

Al terminar de ver todas las películas de la lista, Emma no duda un segundo en apagar la televisión y comenzar con su típico interrogatorio. Algunas de sus preguntas son algo -por no decir bastante- incómodas; la gran mayoría de ellas son para Stephanie, a quien no parece importarle que Emma esté casi metiéndose en su vida privada. Vamos a decirlo como se debe: Anderson era una cotilla de pies a cabeza.