THE GAME © {#1 Begin Again Series}

CAPITULO LI.

« I don't know who's gonna kiss you when I'm gone

So I'm gonna love you now, like it's all I have

I know it'll kill me when it's over

I don't wanna think about it, I want you to love me now »

-Love Me Now, John Legend.

'Porque es mil veces mejor arriesgarse e intentarlo, antes que no hacer absolutamente nada y quedarse con las ganas'

Viernes 02, Junio.
Nueva York, Estados Unidos.

El vestido que usaría esta noche descansaba sobre el edredón de mi cama junto al antifaz, mientras que los tacones descansaban a los pies de ella. Mi cabello se encontraba goteando ya que hace apenas unos minutos atrás había salido de la ducha, y envuelta en una toalla que cubría mi desnudez, me veía atrapada en una pelea interna.

Ir significaría darle una nueva oportunidad a la extraña relación que estábamos construyendo, la cual, lamentablemente, comenzó a demolerse de golpe en cuanto Selena entró en la historia. Nunca fui partidaria de la infidelidad aún así no hubieran sentimientos involucrados de por medio, si estás en una relación, la respetas. Así de simple.

Pero muy en el fondo, sabía que esto no era mi culpa. La situación inicial que nos llevó a este punto podría serlo, sin embargo ella no figuraba entre mis planes porque él la negó, por lo que sin importar cuantas veces intentara ver si era culpable, no encontraba razón.

Quiero asistir, joder sí que quiero. Quiero arreglar las cosas de una maldita vez porque sé que tenemos una fecha de expiración, porque sé que en cuanto vuelva a poner un pie en Boston, me arrepentiré por no haberlo intentando, al menos por una última vez.

«Vive tu día como si fuera el ultimo; disfruta el día a día. Nadie sabe lo que pueda ocurrir mañana, y si algo te pasara -Dios no lo quiera-, al menos podrás decir que viviste tanto como pudiste, que disfrutaste cada segundo al máximo. Porque de eso se trata la vida, de vivirla y disfrutarla. Aprovecha las oportunidades que se te ponen en frente hoy, porque no sabes si las tendrás mañana. Arriésgate, miles de cosas podrían suceder; buenas y malas, pero al fin y al cabo, podrás decir que hiciste aquellas cosas que antes no te atrevías, y podrás sonreír con orgullo de cada una de las cosas que lograste. Te irás con una sensación de satisfacción en el pecho, y eso te hará recordar cada momento con alegría al darte cuenta de lo que haz logrado» La ronca voz de mi papá, Christopher, invade mi mente.

Él siempre ha tenido curiosidad por mi extraño comportamiento. Ha intentado muchísimo sacarme información sobre cómo me siento y cosas por el estilo, preocupado de que quizás esté pasando por un mal momento y que esa fuera la causa de mi forma de vivir la vida adolescente. Lo encontraba adorable, pero era algo fastidioso a veces. Supongo que con este acto de rebeldía le ha quedado un sabor amargo y no dudará en encerrarme hasta los treinta.

Mi mamá, Phoenix, también encontraba algo raro mi tranquilidad. Pero en cuanto se dio cuenta como Emma se comportaba, estuvo más que feliz al darse cuenta que yo podía darle ese giro vuelta a la realidad, mientras que ella podía llevarme por un momento al lado malo. Nos equilibrábamos mutuamente, sin embargo habían momentos en donde Emma se pasaba y las consecuencias se volvían cada vez más grandes, tal como las que tendríamos al pisar Boston.

Con las palabras de Christopher en mi cabeza, decido que realmente debo arriesgarme. No ganaré nada quedándome con las ganas.

Decidida a maquillarme antes de que comience a arrepentirme, me aplico un poco de base, sombras y rímel. Por supuesto, no pensaba colocarme kilos y kilos de maquillaje porque era un total fastidio para mí.