Jason me alcanza la botella y se sienta a mi lado. Él tiene sus manos enganchadas, rodeando sus piernas con sus brazos, pies en el suelo, una posición totalmente relajada.
Idiotamente lindo.
-¿Ya hablaste con Peter?- su voz me sorprendió un poco.
-No... aún no lo he hecho.
-Deberías- me miró a los ojos- Él también ha estado muy preocupado por ti.
-Lo sé. Estaba pensando en volver el lunes a la Universidad.
Jason asiente en acuerdo conmigo.
Un auto se detiene en el estacionamiento detrás de nosotros. Un segundo después, una bicicleta se desliza por allí. La gente había comenzado a aparecer y no lo había notado. Jason se pone de pie.
-Vamos. Caminemos- Él me ofrece su mano, lo cual es extraño en muchos sentidos. Es decir, es dulce, pero es extraño. Varios chicos lo habían hecho por mí antes, luego me daba cuenta que eran unos patanes como la gran mayoría. La gran diferencia era que Jason era completamente opuesto a esos chicos. Y yo estaba loca por Él. Cuando me suelta, extraño su tacto. Caminamos un corto trecho cuando habló.
-Nunca te disculpaste.
Estoy perdida en el hecho de que no sé por qué debería disculparme.
Aparentemente, Jason lee mi confusión.
-Porque tengo un hermano en silla de ruedas. No puedo decirte las veces que la gente conoce a Alex y me dicen que lo sienten.
-Apesta, no me malinterpretes, pero el luce feliz. Como que se ha ajustado bien y esas cosas.
Jason resopla, lo cual no era la respuesta que me esperaba.
-Lo está. Alex es un chico fuerte. Eso es lo que hace todo incluso peor.
-Sí.
Jason me corta antes de que pudiera terminar.
-¿Recuerdas aquella vez que me ausenté por un tiempo en la Universidad?- asentí, comenzando a comprender- mi madre necesitaba ayuda con algo y no quería decir nada porque... supongo que estoy cansado de que sea una excusa para todo, bueno o malo. La gente se pone incómoda cuando tiene que ver con Alex. Ellos nos tienen lástima o no saben cómo lidiar con eso, así que simplemente no lo hacen.
Hay una conexión entre nosotros que nunca hubiese esperado. Cada una de sus palabras enciende una llama en mi corazón porque me siento de la misma forma. Odio la lástima. Papá siempre la tuvo conmigo cuando volvía de la escuela y mi madre comenzaba a gritar o algo por el estilo. En vez de apoyarme, en vez de ponerse en contra de mi madre, se desentendía de todo. Y ponía esa mirada de lástima de la que Jason estaba hablando.
-Cuando conocí a Alex nunca pensé...
-No, no- me detiene con su mano- fue diferente. La forma en que le hablaste, como si fuera una persona normal- se encoje de hombros- fue genial. No había nada de esa incomodidad, ¿sabes? Como si te hubieses sentido con la obligación de hablarle así, y su parálisis fuera contagiosa al mismo tiempo. Odio eso. Pero, anoche, no vi nada de eso.
Comenzamos a caminar otra vez.
-Vaya... ¿La gente realmente reacciona de esa manera? - no es como si fuese un leproso o algo por el estilo, ahora entendía y compartía la molestia con Jason.
-No lo sé. Así parece. Tal vez sólo soy yo, que estoy condenadamente sensible al respecto- suelta una risita.
La urgencia de admitir algo sobre mí juega a escondidas dentro de mí. Quiero hacerlo, pero no sé si puedo.
-Así que sí, gracias. Por todo. Pasar tiempo con ellos porque querías... y ahora he terminado. Eso fue suficiente de mi vida sentimental.
Tomo algo de su valentía, asombrada de lo protector que es con su familia.
-No es una historia sentimental. Lo entiendo, es decir, no de la misma forma- estudio el piso mientras caminamos- pero la lástima, la entiendo.
-¿Quién?- pregunta.
-¿Todos?- mi risa no es real.
-¿Quién?- pregunta de nuevo.
¿Cómo lo sabe? Tal vez la pregunta más importante es ¿puedo decírselo?
-Pensé que habíamos terminado con las historias sentimentales.
-Nop- sacude su cabeza- no vas a salirte de esta. Sólo esto, y después habremos terminado- empuja mi brazo con el suyo y sí, eso me marea un poquito.
-Son varias personas... pero hablando puntualmente... varias personas de la secundaria y mi madre.
Jason maldice en voz baja, pero no hay disculpa. No hay lástima.
-Entiendo lo de tu madre... ya hemos tenido un pequeño encuentro con ella pero... ¿los de la secundaria? No lo entiendo.
Suspiro pesadamente.
-Digamos que a los diecisiete años era un poco... diferente.
Jason me mira con intriga.
-¿Diferente?- asiento.
-Gafas... muchos libros y... bueno, la estatura sigue siendo la misma.
-¿Gafas?- pude ver un atisbo de sonrisa en su rostro. Y una completa luego de que asintiera- ¿los sigues teniendo?
Su pregunta me descolocó ¿Qué tramaba?
Volví a asentir- siempre los llevo conmigo por si se me hacen daño mis lentes de contacto.
Se detuvo. Obligándome a hacerlo yo también y mirarlo con una cara de confusión.
-Póntelos.
-¿Qué? Ni hablar.
-Oh vamos, por favor- decía mientras unía nuevamente nuestras manos- no me reiré ni nada por el estilo.
-No lo sé...- dudé.
-Yo solo... quiero conocerte más, Emma...- dijo acercándose más a mí.
Algún día terminaré con un paro cardíaco y allí ya no será tan divertido todo esto.
De mi pequeña mochila, saqué un estuche de color morado. Al abrirlo se podían divisar unos lentes con un marco negro un poco grueso.
Con las mejillas completamente sonrojadas, me coloqué los lentes. Me arrepentí al instante. Cerré los ojos de la vergüenza, esperando la risa de Jason. Seguro parecía una completa nerd.
Fue muy diferente su reacción a cómo lo imaginaba... como siempre. Al tener los ojos cerrados, solo pude sentir el pequeño contacto de sus manos con mis mejillas. Algo que me hizo sobresaltar un poco.
-Mírame, Emma- pidió en un pequeño susurro.
¿Es que siempre le haría caso cada vez que me pidiera algo con esa voz del demonio?
Como todas las veces, accedí a su petición. Encontrándome con sus pozos negros. Mirándome con ternura.
-Eres hermosa, ¿lo sabes? - ya es la segunda vez en el día que casi me atraganto con mi corazón... genial.
Dejé de pensar una vez que oprimió sus labios contra los míos.
Nota de Autora:
Feliz año nuevo!!!!
Seguramente no me tenían fe y decían "esta chica no va a actualizar ni de broma dos días seguidos"
Pero eh, que aquí estoy. Y con un capítulo más largo de lo normal.
Ya veremos luego cuando actualizo de nuevo. Quizás la próxima semana ya que estaré de vacaciones y sin internet.
Pero bueno, muchas felicidades y gracias. Ya somos 2100 visualizaciones y cierro el año feliz.
Mi objetivo de este año será finalizar la novela. Y (QUIZÁS) haya una segunda temporada.... Hmmm ahí dejo picando.
Recuerden que si comentan, comparten y votan se agradece muchísimo!
Maia.
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Just a Boy
RomanceEn realidad el problema no radica en lo bonito de sus ojos. Más bien en lo expresivo de su mirada. Y vaya que sus ojos son hermosos.