Espérame al otro lado del abismo (LCDVR #2)

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—¡Ya basta Tom! —Exclamó Laura—. ¡Ya te dijo que no quiere pelear! —La chica se cruzó de brazos, colocándose entre los dos, con los labios fruncidos y el carmín manchándole las mejillas.

Unos minutos antes había estado comiéndose la boca con Julio De La Vega, sin preocuparse en absoluto por quien la viera. A Tom no le hubiese importado si fuese cualquier chica, pero ella era su ex y habían terminado apenas unas semanas atrás.

"Ya no siento la chispa" le había dicho y ahora veía la razón; estaba incendiándose con alguien más.

Chasqueo la lengua, tratando de mantenerse calmado, aunque lo único que quería en esos momentos era una pelea. Sin embargo, a pesar de sus quejas él no tenía ningún derecho a reclamar, lo perdió cuando su relación acabó y Tom no la culpaba por ello, él nunca sintió la chispa para empezar, pero se habían separado en buenos términos, así que ¿Cómo es que no había estado advertido de aquello?

—Voy a detenerme —masculló—, cuando me expliques que haces con este —exclamó señalando a Julio con el dedo, quien simplemente resopló cruzándose de brazos y poniendo los ojos en blanco.

—Estoy soltera, puedo salir con quien se me antoje —espetó ella colocándose las manos en las caderas. Aquel era un rasgo característico en la personalidad de Laura, era alguien que hacía lo que quería, cuando quería.

—Claro —Tom se encogió de hombros antes de inclinarse hacia ella con una mueca de total desagrado—. ¿Pero tenías que hacerlo específicamente con él? —resopló—. ¿Qué no sabes que nos odiamos? —Tom movió las manos haciendo evidente su desespero.

—Pues sus problemas no son cosa mía. —Ella estaba furiosa y comenzaba a taconear en señal de molestia, advirtiéndole que bajara el tono, a lo que Tom respondió con tres ruidosas respiraciones para tranquilizarse.

—No seas exagerado Thomas —intervino Julio haciendo una mueca—. Odiarnos es decir demasiado.

Tom volteó a verle, se quedó en silencio, pasmado y confundido por la manera en que Julio le había hablado, casi con...Indiferencia.

—Te odio —aseguró Tom.

—No te conozco tanto como para odiarte —replicó Julio encogiéndose de hombros—. En serio, esto es demasiado ¿No podemos simplemente olvidarnos de todo y hacer como que el otro no existe? No sé tú, pero estoy cansado de pelear, solo quiero pasar un año tranquilo con mi novia y olvidarme de todo este asunto —espetó, lanzando una mirada fugaz al cielo.

Tom se le quedó mirando, abrió la boca buscando un argumento en su cabeza, pero de inmediato la cerró sin tener idea de que decir. Estaba congelado, incómodo, enfermo, el suelo se movió haciéndole sentir mareado, pero trató de no demostrarlo.

"Mi novia" dijo y miro a Laura, pero ella era la ex de Tom ¿No tenía derecho a estar molesto? ¡Aquello era un ataque directo! Sin embargo, no pudo pensarlo de esa forma, dentro de Tom lo único que importaba y golpeaba con fuerza dentro de él eran aquellas palabras: hacer como que el otro no existe.

—Sé que te preocupas por mí —agregó Laura con un suspiro—. Pero puedo cuidarme sola y Julio tiene buenas intenciones. —Ella se inclinó un poco besando su mejilla y luego retrocedió hasta tomar a Julio de la mano, dándole un apretón firme—. Vamos a estar bien.

Laura le miró esperando encontrarse con la reacción violenta de siempre, pero no lo hizo. Tom se quedó en su sitio, con la mirada perdida y el corazón latiéndole muy rápido.

Julio hizo una mueca, intentando ignorar la expresión gélida de Tom mientras le daba un suave tirón a Laura, indicándole que era hora de marcharse. Ella suspiró dándose media vuelta y desapareciendo con él entre la gente.

Sin aliento, Tom se recargó contra la pared tratando de ordenar las cosas en su cabeza.

Sus latidos golpearon en su pecho, amenazando.

Un abismo se extendió delante de él, dejándole al borde del precipicio.

Aquel abismo le miró, sonrió y lo devoró por completo.

Oficialmente comienzan las actualizaciones de esta historia <3