VOLVIENDO A TI

Como pasa el tiempo

Bella pov. 

Ya habían pasado tres semanas desde que mi pequeño Tony vino a este mundo, me sentía la mujer más feliz del mundo tenía un pequeño al que cuidaría como nunca había cuidado algo. 

Esme me había pedido que me mudara con ellos así podría ayudarme a cuidar de Tony mientras yo trabajaba y estudiaba, acepte encantada además parecía ser una linda abuelita aunque no fuera de sangre. 

No había llamado a mis padres y sabía que ellos estarían preocupados por mí, solo sabían que estaba bien y que no me buscaran pero eso fue hace meses. 

Decidí mandarle un correo a mi madre. 

Mamá... 

Estoy bien, se que hace mucho no saben de mí pero no se preocupen todo esta bien después me comunicare con ustedes tengo noticias que darles. 

Te quiero mamá y a papá también. 

Escuche el llanto de mi pequeño, entre a su habitación que conectaba a la mía por medio de una puerta cortesía de Esme. 

-¿Qué sucede cielo? -lo tome en brazos. 

Lo arrulle en mis brazos, tratar de calmar su llanto; cuando se quedo de nuevo dormido lo acosté en la cuna nuevamente. 

Verlo dormir me recordaba a Edward, esos mismos gestos al dormir Tony era identico a su padre en muchos sentidos. 

-¿Bella? -escuche la voz de Esme. 

-Oh, hola Esme. 

-¿Pasa algo? 

-No, todo bien. 

-¿Segura? 

Asentí. 

-Bella, llevo un año conociéndote y es suficiente para saber que el dolor que llevas sobre tu corazón porque es como un peso que cargas sobre tus hombros -dijo maternalmente. 

Suspire. 

-¿Cómo lo sabes? 

Sonrió. 

-Tengo 6 hijos, ahora 7 -corrigió, Esme no solo contaba a sus hijos Alice y Emmett sino que para ella Rose, Jasper, Jacob, Nessie y ahora yo también lo eramos-. Y he pasado con ellos infinidad de cosas. 

Mordí mi labio inferior. 

-Aún lo amas -no era una pregunta. 

Como podía decirle que no a Esme como ella misma lo dijo me conocía perfectamente. 

-Sí, fue mi primer amor, estoy profundamente enamorada de él a pesar de todo. 

-A veces las cosas suceden por algo. 

-Lo sé y era porque yo y él no podíamos seguir juntos. 

Negó con la cabeza. 

-He pensado que lo mejor sería odiarlo por lo que me hizo y desearle lo mismo que él me hizo a mí. 

-A veces el dolor nos hace pensar o hacer cosas que no queremos, muchas veces no sabemos ni siquiera porque lo hacemos... pero si algo he aprendido es que cuando un amor es sincero es difícil olvidar a esa persona, aún así te hayan roto el corazón de la peor manera. 

Suspire. 

-Tal vez Edward no me amaba como decía. 

-Bella, no es por defenderlo pero ¿has pensado que esto solo puede ser una prueba? 

-¿A qué te refieres? 

-Que tal vez el destino solo quiere ver que tan fuerte es su amor, que a pesar de los engaños ustedes puedan salir adelante y darse cuenta de los errores que cometieron.