Quiero una explicación

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Edward pov. 

No podía creer lo que mis ojos estaban viendo, mi Bella que ya no era mi Bella estaba casada. ¿Cómo podía ser eso posible? Negué con la cabeza esto debería ser un error. 

El tipo que se encontraba a su lado tenía al menos unos 27 años tenía el cabello algo largo rubio, ojos azules no del mismo color que los míos sino un poco más claros, era alto creo que de mí estatura. 

El niño no pasaba de los 5 o 6 años tenía el cabello color bronce y los ojos azules, tenía el color de piel de Bella y si no me equivocaba tenía su misma nariz. 

No me agradaba la idea de que Bella estuviera casada eso me arruinaría mis planes pero eso no lo permitiría... ella volvería a mí sea por los medios que sean. 

-No has contestado mi pregunta Bella -dije viendo directamente a los ojos. 

-Lo siento pero tengo que irme, tengo cosas que hacer -dijo aún con el pequeño en brazos. 

Que ahora que lo observaba mejor no se parecía en nada al tipo que estaba a su lado sino a... mí ¿podría ser posible? ¿podría Bella haberme ocultado Bella que tenía un hijo? podía serlo el niño tenía exactamente la edad del tiempo en que Bella y yo estábamos separados... ella nunca me hubiera engañado no cuando aún estábamos casados en eso una voz vino a mi cabeza que me decía "no como tú lo hiciste". 

-Tú no te vas de aquí -me acerque un poco más a ella-. Tenemos que hablar. 

-¿Bella? -el tipo que estaba a su lado le hablo, vi como le pasaba un brazo por los hombros eso hizo que viera todo rojo, quería arrancarle el brazo a ese tipo. 

-No te preocupes Garrett puedo manejar esto -dijo Bella mientras ponía al niño en el suelo. 

No perdí de vista al niño pues una parte de mí sentía que tenía una conexión especial. 

-Garrett llevas a Tony por un helado los veré luego -pidió Bella. 

¿Tony? ¿Así se llamaba? 

El tipo asintió tomo a Tony de la mano y se lo llevo de regreso por el ascensor. 

-Vamos a mi oficina -dijo Bella. 

Asentí. 

Emmett que se había mantenido en silencio solo nos observo, a mí con más furia que nada. 

Entramos a la oficina de Bella que decía jefa de publicidad, no podía creer que haya cumplido su sueño de estudiar y que ahora fuera nada más y nada menos que la jefa. 

-¿Jefa de publicidad? -pregunte al entrar a la oficina. 

Bella se sentó detrás del escritorio, con la mano me indico que me sentara así lo hice. 

-Sí soy la jefa pero no creo que de eso quieras hablar, así que ¿qué es lo que quieres? -dijo con voz fría. 

-Sobre nosotros. 

-Entre tu y yo dejo de existir un nosotros hace seis años. 

-Es que acaso ya te casaste con ese imbécil. 

-Si me case o no es mi problema, es mi vida y eso a ti ya no te incumbe.

-Claro que me incumbe... 

-¿Ah sí? ¿Y se puede saber como que porque? -frunció el ceño. 

Sabía que me estaba comportando como un idiota pero como dije utilizaría todo lo que tuviera a mi alcance aunque tuviera que jugar sucio. 

-Eres mía. 

De pronto Bella comenzó a reír. 

-No veo el chiste -dije entre dientes. 

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