Cuando despiertes

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Edward pov. 

Estábamos sentados en la sala de espera del hospital, Bella se encontraba dormida en mis brazos en sus mejillas aún podía ver sus lágrimas ya secas. 

Deje un beso en sus cabellos. 

-¿Familiares de Anthony Swan? - dijo el médico que acababa de llegar. 

Bella se despertó en ese instante. 

-Nosotros somos sus padres -dijo mientras nos poníamos de pie. 

-Bien, tengo noticias. 

La familia Cullen se coloco detrás de nosotros. 

-Dígame como esta mi hijo. 

-El pequeño Anthony sufrió de una intoxicación fue provocada por unos dulces que estaban envenenados aún estamos haciendo análisis sobre la sustancia que ingirió, es desconocida para nosotros, tuvimos que ponerlo en estado de coma, es una forma de defensa para que su cuerpo elimine el veneno... lo que hasta hora sabemos es que esta sustancia destruye su organismo poco a poco la estamos tratando con medicamento pero como mencione no sabemos contra que estamos luchando. 

Bella se soltó en llanto en mis brazos, la abrace más fuerte contra mi pecho uno de los dos debería tratar de ser el más fuerte. 

-Miii peeequeñoo Edwwardd, nuessstrrooo peequeñoo -decía entre sollazos. 

-Tranquila, todo estará bien te lo prometo. 

Mientras seguíamos abrazados caminamos hacía las sillas de nuevo, nos sentamos y Bella escondió su cabeza en mi cuello.  

Minutos después de que Bella se quedo dormida, mi quite mi chaqueta y la arrope con ella, deje un beso en su frente y la recosté. 

Me puse de pie. 

-¿A dónde vas? -me pregunto Alice quien era la única junto con Jasper que se habían quedado con nosotros, los demás estaban en la cafetería. 

-Tengo que ver a Tony. 

-El doctor dijo... 

-Se lo que dijo el doctor pero yo necesito verlo, es mi hijo y de tan solo pensar en la idea de perderle -suspire. 

-Bien, entonces ve. 

Camine hacia la estación donde había dos enfermeras cuando estaban distraídas aproveche y camine por uno de los largos pasillos... vi un letrero que decía que el área de terapia intensiva pediátrica estaba en el último piso, tome el ascensor. 

Llegue al último piso, salí del ascensor. Camine hacía mi izquierda y me tope con terapia intensiva, abrí la puerta y de nuevo me encontré con otro nuevo pasillo. Abrí una a una las puertas hasta que di con la de Tony. 

Mi campeón estaba conectado al monitor que checaba sus signos constantemente, sus ojos estaban cerrados no quería pensar en que nunca más vería sus ojos... no quería perderle ya lo había hecho por seis años y aun me faltaba recuperar el tiempo perdido. 

Me acerque hasta él y tome su pequeña manos entre las mías. 

-Hola campeón, no sé si me escuchas pero espero que si lo hagas sino tendré que volver a repetir esto - unas lágrimas escaparon de mis ojos-, entonces me veras llorando y pensaras que soy un cobarde llorón -reí sin alegría-. Te necesitamos Tony, tienes que luchar tu madre y yo te queremos a nuestro lado seremos una gran familia, te prometo que te daré un hermanito me encargare de convencer a tu madre, me gustaría una princesita así podíamos entre los dos cuidar de ella cuando esos chicos malos intente conquistarla seríamos sus guardianes hasta que ella cumpla 40 no mejor 50 años ¿qué te parece? -sonreí levemente-. Tony quiero darte una familia pero para ello necesitas estar aquí con nosotros, tienes que abrir tus ojos. También te prometo que te enseñare la forma de que conquistes a las chicas, como cortejarlas para que al final cuando elijas a una de ellas para compartir tu vida seas muy feliz. Despierta campeón te necesito a nuestro lado. 

En la puerta se escucharon unos sollazos. 

Voltee y ahí estaba parada Bella con sus mejillas inundadas en lágrimas. 

-Son unas hermosas palabras -dijo mientras caminaba hacía mí.

-Solo es la verdad. 

Coloco su mano sobre la mía que sostenía la de Tony. 

-Te prometo que en el momento en que Tony salga de aquí, tú y yo buscaremos una iglesias y nos casaremos... de nuevo. 

-¿Lo dices en serio? 

-No jugaría con algo como esto. 

-Le he prometido muchas cosas y las pienso cumplir no quiero separarme de él ni un minuto más. 

-Lo sé lo escuche todo, un hermanito eso será algo complicado. 

-No, si tenemos práctica. 

Pude notar un leve sonrojo en sus mejillas. 

-Luego hablaremos sobre eso. 

Asentí. 

-Tony es un niño muy fuerte y se, siento que pronto estará de nuevo corriendo por la casa. 

-De eso no me cabe la menor duda. 

Deposito un beso en la frente de Tony, yo hice lo mismo. 

-Creo que deberíamos de salir de aquí, se supone que no debemos estar aquí -dije. 

-Vamos, tal vez el médico nos tenga nuevas noticias. 

Salimos de la habitación de Tony tomados de la mano. 

-Tenemos que averiguar quien le dio esos dulces a Tony, quien quiera que lo haya hecho me las pagar -susurro. 

-Eso puedo asegurartelo Bella, yo mismo me encargare de averiguarlo. 

Cuando llegamos a la sala de espera todos los Cullen ya se encontraban ahí. 

-¿Hubo nuevas noticias? 

-No -contestó Esme. 

-¿Alice? -hablo Bella-¿Tony no comento nada sobre quien le dio los dulces? 

-No, Bella. En la madrugada tan solo se quejó por unos segundos y perdió la consciencia. No sabemos ni siquiera de donde saco los dulces, pensamos que el los tenía o tu se los habías dado. 

-Cuando Tony despierte de nuevo le preguntaremos, entonces quien le haya dado esos dulces se atendrá a las consecuencias, como que me llamo Edward Masen.

Bella se sentó en una de las sillas ocultando su rostro con sus manos. 

-Bella, hija creo que necesitas comer algo. 

-No quiero comer nada. 

-Bella te hará daño necesitas estar fuerte para Tony. 

-Esme tiene razón Bella, vamos para que comas algo -dije mientras me acerba a ella. 

Se puso de pie y gritó. 

-NO QUIERO NADA.

-Bella... 

-NO EDWARD, LO ÚNICO QUE QUIERO ES QUE MI HIJO SE RECUPERE Y HACER PAGAR A QUIEN QUIERA QUE LE QUISO HACER DAÑO -camino hacia la salida. 

-Bella... -fui tras de ella. 

Pero entonces se detuvo a medio camino y se desplomo en el suelo. 











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