La gorditas también se enamoran

47

ADAM.

Luego de haber comprado mi traje junto con Jackson quede con Mandy, sé que nuestro rompimiento fue en malos términos por cuestiones de sus celos y por lo que hizo en frente de todos en aquella fiesta. Cuando hable con ella se veía muy emocionada, incluso algunos a nuestro alrededor comenzaron a especular, y por lo que hable con Amber, ella no sabía de los rumores que se habían esparcido rápidamente por los pasillos de la escuela. El único objetivo que tenía era aclarar las cosas, y perdonarla, porque soy una persona renovada y necesito cerrar ciclos y comenzar con el pie derecho.

Cuando le dije a Jackson que había citado a Mandy puso el grito ene l cielo, pero se calmó cuando le dije que solo era para hablar y blah, blah, blah, así que debía terminar esta charla rápido para evitar que crezca la desconfianza, después de todo, él está protegiendo a su hermana, y lo mismo haría yo si alguien llegara a romperle el corazón a mis dos hermanitas.

Veo a Mandy sentada en una de las bancas del parque en donde la había cita, esta al verme, se levanta y acomoda su escote y sonríe, aquella chica nunca iba a cambiar.

- Pensé que nunca llegarías. – dice con coquetería, se inclina hacia adelante para besarme, pero hago a un lado para evitarlo.

- Mandy no estoy aquí para lo que sea que estés pensando. – hablo con un tono serio.

- Si no estás aquí para volver, ¿Qué hacemos aquí? ¿acaso seremos amantes?

- Estamos aquí para hablar.

- Aburrido. – coloca sus ojos en blanco.

- Mira, yo solo quiero decirte que he comenzado una nueva etapa de mi vida en donde las personas que me rodean me quieren, rodeado de comprensión y apoyo...

- Yo puedo darte todo eso y más. – me interrumpe como si fuera obvio.

- No Mandy, no puedes, tú no sabes por las cosas que he pasado, pero ella si ha estado ahí para mí, y tal vez te hubieras dado cuenta de lo que me sucedía si no estuvieras tan enfrascada en celarme todo el tiempo. Pero sé que en parte tu actuar es por mi culpa, antes pensaba que dañando a las demás personas me llenaría de vida y estuve equivocado, y quiero pedirte perdón por eso.

- ¿enserio me estás diciendo esto? – pregunta con una risa irónica. - ¡Adam mi vida era normal hasta que llegaste, me enamoraste y luego te fuiste con Ashley Bradford, no sabías como me sentía en ese momento!

- Yo lo s...

- ¡No sabes una mierda! – las lágrimas comienzas a rodar por sus mejillas, pero se notaban que no era de dolor, eran de furia. – me convencí de que si lucia como ella tal vez, solo tal vez tú te volverías a fijar en mí, ¿sabes que sucedió? ¡Volviste a fijarte en mi! Sabía que estaba mal haber cambiado por un hombre, mi madre me recalcaba muchas veces que no dejara que ningún hombre me hiciera sentir menos por como soy, y míranos, mírame, es la palabra correcta, con la persona más hipócrita del mundo, el que una y otra vez daño a la chica a la que ahora está "enamorado"

Me merecía todo lo que me estaba diciendo Mandy, y estaba consciente de aquello, pero Cómo le iba a dar entender que yo cambie, que ya no soy aquel chiquillo que se fijaba simple y llanamente por algo físico, que Amber a pesar de lo que le hice si logro perdonarme, y la admiro por eso, porque si hubiera estado en su situación no hubiera perdonado a nadie, pero ella tiene un corazón noble y que vivir con ese resentimiento la dañaría.

- Lo siento. – susurro.

- ¿eso es lo único que vas a decir? – bufa. – y eso que querías hablar. – envidio a Amber y no es solamente porque te tiene a ti, sino porque para ella todo fue simple, siempre fue ella misma, ella es lo que yo no tuve el valor de ser. – todo tiene sentido entonces, Mandy estaba resentida con ella misma, y celosa de que Amber no cambio por mí, siempre fue ella misma sin importar que, pero ella si me cambio a mí, para bien.