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Cinco meses. El embarazo iba bien y las cosas con Ethan también. Me estaba cuidando muchísimo y me complacía en mis antojos, que no eran pocos. Ya sabíamos el sexo del bebé. Iba a ser una niña. Una hermosa niña. Estábamos muy ilusionados. Emma ya había comprado algunas cositas. Las cosas iban bien. Muy bien de echo. Thomas y Fer seguían muy bien. Thomas se decidió a contarselo a sus padres y lo aceptaron. Adoran a Fer. Clara y Christian están pasando un tiempo distanciados. Ella estudiando en la universidad y él trabajando no tenían tiempo para verse demasiado. Emily y Javi seguían bien, de echo se han ido a vivir juntos. Tienen una casa preciosa a unos minutos del pueblo.

La barriga ya se me notaba. Un bulto precioso. Amaba sentirme así. Hoy era Sábado. Ethan estaba junto a los chicos mientras que las chicas estaban conmigo mirando tiendas de bebés y comprando ropa para mi niña. Aún no sabíamos como llamarla. Pero eso algo que sinceramente no importaba demasiado mientras viniera sana y salva. Estaba cansada. Los pies se me hinchaban y estaba mareada. Hace dos semanas que los mareos se hacían presentes cuando caminaba o hacía calor. Supongo que el embarazo era lo que lo causaba. Me senté en una mesa de una cafetería y suspiré.

-Estoy agotada.-

-Descansemos un poco y tomamos algo.- Habló Clara sentándose a mi lado.

-Si, después seguimos con las compras.- Esta vez fue Emily.

Asentí y un joven llegó a la mesa con una libreta para el pedido. Pedimos tres batidos y un cappuccino para Emma. Si, ella también vino. De echo era la única que sabía conducir. El chico trajo el pedido y nos lo tomamos tranquilas mientras hablábamos de cosas triviales.

-¿Nos vamos a casa?.- Pregunté esperanzada de que así fuese.

-No.- Dijeron las tres a la vez. Las miré con las cejas alzadas.

-Hemos comprado ropa para la nena, ahora toca ropa para ti.- Sonrió Emma.

-Oh no, ya sabéis que no quiero.-

-Y eso nos da igual.- Dijo sin Clara. Ella siempre tan directa. La miré fulminante.

-Vamos Nikki, concedenos esto, solo es un poco de ropa.- Hablo con dulzura Emily.

-Está bien.- Me rendí. Era imposible que las hiciera cambiar de opinión.

Nos levantamos de la mesa y nos dirigimos a las tiendas de ropa de mujer. Esta tarde iba a ser larga. Compramos de todo. Dios, nunca habia visto tanta ropa. Me han regalado muchas cosas. Vestidos, camisetas, pijamas, pantalones largos y cortos. Incluso algunos accesorios como colgantes, pendientes, pulseras, sombreros y turbantes. Era demasiado para mi pero cualquiera se negaba, eran muy tercas. Al menos las cosas no eran caras. Eso era algo que me aliviaba. No me gustaba gastar mucho y menos que lo gasten otras personas en mi. Mire la hora. 14:30. Ha pasado una hora. Una hora de tiendas. Madre mia. Nunca habia estado en tantas tiendas a la vez.

-¿Donde quereis comer?.- Preguntó Emma.

-Chino.- Eligió Clara.

-Pizza.- Eligió Emily.

-Italiano.- Elegí yo.

-Decidirse chicas, a los tres no podemos ir.-

-Va, elegid vosotras, voy a llamar a Ethan un momento.-

-Hemos decidido.- Habló Emily.

-Eh.. si, si, elegimos italiano.- Las tres se miraron y yo confusa asentí y nos dirigimos al coche en el cual Emma nos iba a llevar al restaurante.

Comimos. Pasamos una mañana y medio día genial pero estaba cansada y quería echarme un rato en la cama con mi novio a descansar. Llegamos a casa y mi padre y Ethan estaban sentados en el sofá viendo una película que echaban en la tele.

-Hola.- Saludé yo ya que fui la primera en entrar.

-Hola hija, ¿has comprado mucho?.- Me preguntó con una sonrisa.

-Demasiado para mi gusto, aunque todo lo han querido regalar ellas.- Suspiré agotada y me tumbé en el sofá con la cabeza en las piernas de Ethan. Este me dio un beso en los labios y con una sonrisa fui quedando dormida.

***

No podía creérmelo. Esto es una locura. Una preciosa locura. Miré asombrada el lugar. Creía estar en un sueño pero no. Al ver a mis amigos, a mi familia, a Ethan. Sabía que todo era real. Sonreí como una niña ilusionada y entré al lugar. Un jardín enorme para jugar. Aquí íbamos a disfrutar muchísimo. Lo sabía. Ethan se posicionó a mi lado y jugueteaba con unas llaves entre sus dedos. Me sonrió y dejó que abriera la puerta de nuestro nuevo hogar. La casa era preciosa. Grande, lo suficiente para vivir bien y que nuestros hijos también lo hagan. Miré el interior y cada cosa que había me asombraba mas. Era de dos plantas. En la de abajo había una gran sala a la izquierda y una cocina con barra americana a la derecha la cual daba a un pequeño salón donde estaban los sofás y la televisión, en el hueco de debajo de la escalera un pequeño aseo. En la planta de arriba habían cuatro habitaciones y un baño enorme.

Bajamos a la entrada y todas mis cosas se encontraban allí. Miré a mi padre y este me sonrió.

-No sabía que quisieras quitarme de encima tuya tan rápido.- Bromeé.

-Es hora de que empieces tu vida.- Me abrazó. -Al menos te tengo cerca.-

-Si.- Lo miré. -Te quiero papá.-

-Y yo a ti hija.- Me dio un beso en la frente.

Todos me abrazaron y salimos a la parte trasera de la casa donde habían preparado una barbacoa. Estaba feliz. Demasiado. Tenía todo lo que quería. Todo lo que necesitaba. No pedía nada mas. Con tener a mi familia y a mis amigos a mi lado era la mujer mas feliz del mundo. Me senté en una de las sillas que habían alrededor de la mesa tomando un zumo fresquito de naranja. Alguien se sentó a mi lado. Miré y era Fer. Le sonreí. Nos miramos y reímos. Supongo que todo ha cambiado mucho de un año para otro. El con Thomas y yo aquí embarazada. Quien lo diría. La niña no paraba de moverse. Un bulto en la barriga hizo a Fer sonreír.

-Va a ser futbolista.- Rio.

-Si, parece ser que si.- Reímos los dos.

Ethan llegó y se sentó a mi lado. Depositó un beso en mis labios y otro en mi barriga. Era tan adorable. Me encantaba. Lo quería. Lo amaba. Era lo mejor que me ha pasado en la vida. Y ahora mas que nunca lo necesito a mi lado. Ahora mas que nunca me doy cuenta de lo que tengo a mi alrededor y estoy dispuesta a luchar por ello. Porque mi familia es lo mas importante que tengo.

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HOLA MI AMOREEEES! Muy buenas. Ya está el capítulo 25. Por fin!! Espero que os guste y los disfrutéis.

He tardado un poco mas pues estoy estudiando y haciendo mil cosas. Quería avisaros de que he publicado un nuevo libro. No es una historia. Es un libro en el que voy a poner cosas sobre mi. De echo así es el título COSAS SOBRE MI. Original, lo sé. Que se note la ironía. Bueno, no me enrollo. A parte de escribir cosas sobre mi también podéis hacer preguntas y cuando sean varias preguntas. Mínimo diez. las contestaré todas.

Que tengáis un lindo día. Disfrutad. Mil besitos hermosuras. ♥♥ 

Mi insoportable hermanastro.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora