¡Me Gustas, Senpai!

Capítulo 38

– ¿Igarashi? – El mencionado hizo un sonido con la boca, indicándole al rubio que tenía su atención – Tú... ¿Quieres hacerlo? – El pelinegro le miró con una ceja curveada.

– ¿Hacer qué exactamente? – Preguntó, pero Nana sabía que la intención era molestarlo.

– Sabes qué, idiota; no te hagas el tonto – Una vena se hinchó en la frente del menor. Yuusuke rió un poco por la respuesta del otro, pues ya se la esperaba.

– Si te soy honesto, sí; pero no te quiero forzar a nada – El de mirada púrpura llevó sus brazos detrás de su cabeza mientras bostezaba. Nozomu le vio con una sonrisa.

– Pero yo también quiero – El rubio acercó su rostro peligrosamente al contrario, esperando ver la reacción de este. Los orbes morados solo le vieron curiosos, esperando cualquier movimiento.

– Entonces... ¿Qué hacemos? – Era obvio que la pregunta sobraba, pero ninguno de los dos sabía cómo iniciar el acto. Nanashima frunció los labios; Igarashi frunció el ceño.

– Podríamos... No sé... ¿Tocarnos? – Preguntó con inseguridad. El pelinegro le miró con curiosidad, mientras que las mejillas del menor se tornaban rojas. Ahí estaba la faceta de chico lindo y sumiso.

– Vale, tú empiezas – Nanashima se sonrojó aún más pero no dijo nada al respecto. Frunció el ceño aun con el rojo impregnado en la cara, mientras dirigía sus manos a la ropa de Yuusuke – ¡Hey! ¿Qué carajos estás haciendo? – Preguntó el otro confundido y sonrojado.

– Tú dijiste que yo empezaba y eso es lo que estoy haciendo – Replicó Nozomu un poco molesto.

– ¡Pero pensé que te ibas a tocar tú solo! – La faceta del rubio cambió por completo ante todas las estupideces que su "Valentín" estaba diciendo en ese jodido momento.

– Mira, tú querías que yo comenzara; bien, yo comenzaré. Ahora cierra la puta boca y no te quejes – El de mirada verde felina se acomodó en la cama de tal forma que su cabeza quedó entre las piernas de Yuusuke – Te la voy a chupar, así que si vas a hacer otra cosa aparte de gemir, que sea follarme la boca, ¿Entendido? – El pelinegro asintió algo asustado con el carácter del menor – Entonces aquí voy.

Nanashima tiró del elástico del short celeste de su compañero para bajarlo junto con la ropa interior, solo para ver como el miembro de este comenzaba a despertar. Igarashi no supo cómo sentirse al respecto porque la actitud de pasivo dominante del otro le había puesto caliente.

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Shinomiya sostuvo entre sus manos aquella caja con contenido vergonzoso. Según Mutsumi, esa caja la había dejado Kae, y con lo pervertida que era la chica y la inocencia de su senpai, era obvio que estaba diciendo la verdad. ¡Mutsumi no sabía ni qué era con exactitud lo de la caja! Pues las letras solo decían Lencería y este ni sabía que significaba esa palabra. Mierda, pero en parte, era lo único que podría quedarle.

– Está bien, lo usaré – El castaño tomó la caja y la camisa de manga larga mientras sentía una vena hinchada en su frente. A veces Kae se pasaba de pervertida. Mutsumi salió de su habitación con el menor siguiéndole, hasta que llegaron al baño y Asuma dejó que Shinomiya entrase para luego decirle donde estaba cada cosa.

– El agua está caliente y hay baño de burbujas por si quieres – Señaló dos frascos diferentes, pero que ambos eran para baños de burbujas, pero de diferente color – El shampoo está aquí y el jabón también, he dejado una toalla limpia para ti así que no te preocupes – La sonrisa del mayor mientras le enseñaba a Hayato donde estaba cada cosa era muy brillante – En cuanto termines me bañaré yo... – Dijo decidido, mientras intentaba salir del espacio pequeño.

– Y-Yo... – Shinomiya le detuvo tomándolo de la muñeca. Sus mejillas estaban tan rojas que contrastaban con su piel blanca – Q-Quisiera que, tu y y-yo, nos bañemos j-juntos... – Finalmente la cara del castaño adquirió un color rojo escarlata, mientras los ojos verdes de Asuma le miraban sorprendido – P-Para ahorrar t-tiempo y agua, y... bueno... mejor olvídalo... – Se quedó sin habla.

– Está bien, si eso quieres tampoco voy a negarme – El mayor juntó su frente con la del chico de primero, sintiendo lo caliente de la piel de este. Compartieron un pequeño beso antes de que Asuma se separase otra vez – Entra tú primero, voy por mi ropa – Le informó mientras salía del cuarto de baño y dejaba al menor solo.

Sin perder tiempo, Hayato comenzó a desvestirse de manera rápida para dejar su ropa sucia en algún lugar por ahí, claro, algo ordenada pues tampoco quería lanzar su ropa como vago; se metió en la tina de tamaño grande y dándose cuenta que el agua era transparente, vertió uno de los líquidos de baño de burbujas. Era de color morado y un aroma a lavanda inundó sus fosas nasales.

Las burbujas hicieron lo suyo y ya no podía transparentar nada. Mutsumi entró de nuevo al baño unos minutos después. Dejó su ropa limpia junto a la del menor mientras este miraba de reojo a su senpai desvestirse. Shinomiya apenas y pudo ver cómo es que el mayor se sacaba la camiseta antes de voltear el rostro sonrojado, esperando a que el otro se desvistiera por completo y entrase a la bañera.

Escuchó el ruido del agua a su espalda y como es que esta se movía por toda la tina, sabiendo que Asuma estaba entrando a la bañera. Hizo espacio hasta que finalmente sintió al mayor sentado a su espalda. Se quedó rígido y abochornado. Ambos estaban en una tina de baño, desnudos, ¿Qué seguía ahora? Eso era algo que Hayato no había pensado cuando le dijo su idea al contrario.

– ¿Hayato-chan? – Preguntó el de cabellera castaña oscura, mientras intentaba abrazar al menor.

Sin embargo, Shinomiya se giró de golpe para encarar al más alto con una mirada llena de determinación en sus orbes color miel, antes de que estampara sus labios con los ajenos...

Bien, primero que nada una disculpa por actualizar un mes después. Lo que pasa es que no quería que tuviesen el fic de poquito en poquito, y decidí ponerles todo de golpe XD

Por el momento es todo, pero como podrán haber notado se viene el lemon, hard, salseo, R18, como quieran decirle, pero será después XD Espero no tardarme.

Besos, y los quiero mucho~