Narra ____.
Como yo dije, íbamos a ir a la piscina y realmente, no sé lo que sentía. Estaba nerviosa, porque iba a convivir con Dani y David a la vez y...¿Quién me decía que no iba a volver a sentir cosas por David, por muy segura que estuviera de mi relación con Dani? David me atraía, mucho. Pero, a la misma vez, estaba muy entusiasmada por ir, y estar un rato con Rebe, todos juntos, como solíamos estarlo.
*Al día siguiente*
Lo primero que hice al depertarme fué ponerme nerviosa. Sí señor. Fuí al cuarto de baño y rebusqué entre donde se supone que estaban los biquinis. Pero no. No estaban. Cogí a toda prisa una blusa y unos pantalones, con mis converse negras, cogí las llaves y me fui a comprar, sin tan siquiera decirle adiós a Dani.
Salí hacia el centro comercial a toda prisa. Cuando llegué, me dirigí rápidamente a la primera tienda que encontré de bikinis. Había uno bastante sexy, y lo escogí porque quería provocar sensaciones en Dani. Nada más pensarlo, un intenso calor recorrió todo mi cuerpo. Lo escogí y rápidamente me fuí a casa para prepararme.
Llegué a los ¿dos minutos?, y fui directa a cambiarme. Me puse el trikini y una blusa blanca que lo transparentaba, con unos pantalones cortos y unas sandalias. Salí de la habitación y Dani me vió. Sentí un ligero cambio en sus pantalones, que se le hicieron más estrechos de repente, y supuse en ese momento que estaba jodidamente empalmado.
No pude evitar reírme ante su reacción y le di un corto beso en los labios.
-Reserva tus ganas para luego, cariño. -Le guiñé un ojo y acaricié sus partes íntimas por encima de la ropa, lo que hizo que jadeara levemente. Por Dios, me quiero matar ya. Le deseaba un montón, pero faltaba media hora para quedar con Rebe y...David...
*Media hora más tarde*
Dani me cogió de la mano y fuimos hasta la recepción, donde teníamos un taxi reservado para ir a la piscina donde habíamos quedado. Se pasó todo el viaje cogiéndome de la mano y relajándome, diciendo que todo estaba bien. Llegamos a la piscina y estaban ellos esperandonos, cogidos de las manos y algo entró en mi interior con mucha fuerza. Creo que eran celos. Pero no puede ser, yo no siento nada por David.
Nos saludamos con dos besos, hasta que llegué a David, que me miró de una forma rara y con mucho brillo en los ojos. Me iba a dar dos besos, y los dos nos giramos a el mismo lado, y sin querer, nos besamos levemente. Miré hacia atras pero ni Dani, ni Rebe se dieron cuenta. Él me cogió de la cintura con un roce, muy delicadamente, y me sentí ARDER. Sus ojos marrones estaban dilatados y realmente, no sabía que hacer.
Estuvimos todo el tiempo pasándolo bien, muy bien en realidad. Echaba de menos pasar el tiempo con ellos. David me miró, y noté otra vez la misma mirada que me echó al principio. Me dolió la cabeza y me disculpé de ellos, diciendo que iba a ir al baño.
David me siguió.
