Cuando No Puedes Escapar Del Pasado

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El cuerpo de Jimin seguía inconsciente en el suelo, mientras que los tres matones se quejaban del dolor producido por los disparos ejecutados por Yoongi, el cual se encontraba inmóvil mientras veía sus manos sosteniendo el arma.

Hasta el último minuto había sido un cobarde, el cuál no se había atrevido a matar a los que se atrevieron a golpear a Jimin... Su Jimin.

Sabía que la policía no tardaría en llegar, y aunque quería moverse y escapar con Jimin de ese lugar, sus piernas, por mucho que lo intentara, no se movían.

Ni si quiera escuchaba lo que Taehyung le gritaba, al parecer, a Hoseok, solo se limitó, como un idiota, a mirar sus manos y luego a Jimin, sintiendo como su pecho se oprimía y su conciencia le decía a gritos que era un fracasado, la vergüenza de la familia que alguna vez tuvo y la perdición de Jimin.

Un sonido estruendoso lo despertó de sus oscuros pensamientos, la puerta había sido azotada contra la pared por un ocupado Hoseok que arrastraba de los brazos a la inerte zorra de vestido rojo.

— ¿Q-Qué haces? — Preguntó dubitativo.

— Tranquilo... Taehyung me ha instruido de todo, tu solo toma a Jimin y sal de aquí — Dejó a la zorra en medio del cuarto y sacó un pañuelo de su bolsillo — La policía no tarda en llegar.

— Está bien... te ayudaré, puedo quedarme — Respondió en un susurro.

— Yo terminaré aquí... toma a Heechul y sácalo de aquí, parece que ni puede moverse.

Yoongi asintió con su cabeza y tomó de los brazos a un conmocionado Heechul, el cual lo miraba con ojos de cachorrito asustado.

Mientras salía, Hoseok le pidió que le pasara el arma con el que había disparado a los tres idiotas, por lo que Yoongi se la pasó sin rechistar, observando como con un cuidado único, Hoseok limpiaba el arma con el pañuelo y lo dejaba con delicadeza en la mano de la mujer.

Salió del cuarto procesando la situación, con un Heechul que sollozaba por lo bajo mientras tenía una mirada perdida.

— ¿Tú le dijiste que hiciera eso? — Le habló Yoongi a Tae.

— Sip — Respondió orgulloso.

— ¿Cómo lo sabías?

— Ver películas me da algunas ideas, Yoongi — Sonrió con autosuficiencia aunque el mayor no podía verlo.

— De verdad debes ser un genio — Respondió Yoongi con una sonrisa cansada, agradecía tener a la tropa de idiotas con él en los momentos que no podía pensar con claridad.

Sentó a Heechul cerca de la entrada de su enorme casa, mientras a lo lejos vio como un aturdido Jimin caminaba sujetándose de los hombros de Hoseok.

— Escucha Heechul... necesito que pongas mucha atención — Éste solo asintió con la cabeza — Cuando lleguen los oficiales dirás que la zorra esa le pagó a los matones esos para que te mataran... pero que cuando fueron a buscarte tú les ofreciste más dinero y decidieron trabajar para ti, por lo que la zorra enloqueció he intentó matar a los tres idiotas esos... ¿entendiste?

— S-Si — Yoongi apretó los hombros de Heechul dándole ánimos y ayudó a Hoseok a sacar a Jimin de ese lugar, cuando llegaron a las escaleras que daban a la salida, se encontraron con el resto de chicos intentando socorrer a un pálido Jungkook que intentaba reprimir los jadeos de dolor.

En menos de cinco segundos, el automóvil de Bang se encontraba estacionado en frente, se subieron a la velocidad de un rayo y escucharon a lo lejos como las sirenas de los policías se acercaban cada vez más.

Una chica llamada Min Yoon Ji | YoonMinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora