Mio, y para siempre (FINALIZADA)

Capitulo 14 "Nadie nunca"

Katniss Pov

***

Empecé a toser porque el humo que invadía todo el cuarto llegaba a mi garganta. Aunque tratara de tomar aire por la nariz o por la boca, este parecía querer ahogarme.

Apoye una mano en la espalda del niño que se aferraba a una de mis piernas, y con la otra acaricie mi vientre que se encontraba anormalmente duro, sentía en lo más bajo de la espalda puntadas cada vez más intensas y duraderas.

En ese momento pensé que no saldríamos vivos de ahí, esos eran mis últimos instantes de vida, y elegí pensar en todos aquellos momentos felices que había tenido.

Recordé a mi familia en Atenas, en cuanto sufrirían al enterarse de las horribles circunstancias en las que morí, pensé en Peeta, en como mis hermanos podrían responsabilizarlo de lo sucedido...

Pero entonces olvide el futuro y solo pensé en el pasado, en la primera vez que me beso, o la primera vez que me hablo, incluso en la primera vez que hicimos el amor, había sido tan feliz con él y lloré porque todo lo perdería en unos instantes...

***

Al despertar abrí los ojos de repente y tome aire con nerviosismo. La luz me cegó unos momentos, pero luego pude enfocar mi visión y observar a mi alrededor.

El malestar que sentía en todo el cuerpo, me recordó lo que había sucedido luego de que Gale llegará a buscarnos echando abajo la puerta de la habitación.

Cerré los ojos un momento, tratando de olvidar, pero inmediatamente imágenes de un niño demasiado pequeño y frágil invadieron mi memoria.

Mi hijo. Resultó extremamente doloroso verlo cubierto de sangre cuando lo sacaron de mí, era más pequeño que los otros bebés, y por ese motivo no quise que adelantará su nacimiento. Lamentablemente fue algo que no pude controlar.

La imagen de él tendido sobre la cama entre mis piernas nunca podrá abandonarme, y aun ahora no podía comprender el contraste que existía entre el niño que vivía en mi vientre, inquieto y perspicaz, y el que vi cuando nos separaron, quieto y sin vida.

Ahora mismo parecía irreal que pudiera sentir la suave superficie debajo de mí espalda, o la fría brisa que entraba por la ventana, porque por dentro no sentía nada, estaba completamente vacía...

Mire los pies de la cama hasta que la puerta se abrió, cerré los ojos no queriendo hablar con nadie y solo escuche el movimiento en el cuarto.

Sonó como si tela se rasgara una y otra vez, imagine que se trataba de Rue, preparando paños para los sangrados que me había dado cuenta aún tenía.

No sabía cuánto tiempo había pasado, lo último que recordaba era estar gritando contra la puerta para que me devolvieran a mi hijo, y después...

Abrí los ojos cuando percibí que la presencia a mi lado no era la de mi amiga.

Antes había sentido a mi cuerpo reaccionar así, la tensión de mi cabeza a los pies, ya conocía quien era la única persona que lo provocaba.

Peeta se quedó inmóvil mirándome después de destaparme.

¿Qué hacía el con los paños en la mano y descubriendo mi cuerpo? ¿Acaso...

-voy a llamar a Rue- dijo entonces y se marchó, solo vi su espalda salir de la habitación.

Mi amiga entró momentos después, y siguió con lo que imaginé que Peeta tenía intenciones de hacer, ella tampoco hablo ni me miro demasiado, creí que ambos temían mi reacción...