Ya habían pasado dos horas desde que Damon se fue a la reunión, ¿por qué no me llamaba? Dijo que no le llevaría mucho tiempo. He intentado contactar con Enzo, pero tiene el móvil apagado. Cada vez podía mantener menos la calma. Esta no era manera de disfrutar de la Ópera, era imposible hacerlo sin tener noticias ni de mi novio ni de mi tío.
Traté de respirar con calma. Debía mantener la mente fría, Damon era un vampiro, sabría defenderse. Además, no se había ido solo, sabía que estaba con Enzo. Aún así tenía un mal presentimiento, y rara vez me equivocaba.
El móvil vibró en mi pantalón, haciéndome pegar un respingo.
—Elena, ¿qué tal la Ciudad del Amor? Seguro que genial...os echo de menos.
—Blake—sonrió al escucharle—Esto es increíble, tenemos que traerte algún día. También te echamos de menos...¿te gusta Mystic Falls?
—Me encanta—casi pude notar su sonrisa al otro lado de la línea—He conocido a un chico llamado Matt, camarero, es muy simpático. También he estado con Bonnie y Caroline, me han enseñado el pueblo y he podido entretenerme.
—Me alegro mucho, espero que no te vuelvan demasiado loco con sus dramas femeninos...
—No te preocupes, ya les he ayudado a solucionarlos todos. Ser italiano ayuda bastante—no pude evitar reír al imaginar la cara de mis amigas ante las soluciones del pequeño adolescente—Por cierto, ¿sabes algo de Damon? No me coge las llamadas ni me responde a los mensajes.
—Damon se fue a una reunión con Enzo esta mañana, y habíamos quedado hace un par de horas, pero aún no sé nada de él.
—¿Crees que le ha pasado algo? Si es necesario voy allí.
—Se habrá entretenido en unas copas con Enzo, no te preocupes. Si hay cualquier problema te aviso, pero no es necesario que vengas.
—Okey, avísame con cualquier cosa—se oyó cómo una puerta se abría y lo que parecía ser un grupo de gente muy animada entrando en avalancha—Te dejo, voy a ayudar a unos amigos con unos trabajos. Te quiero mucho, mucho.
—Más vale que no hagas una fies...—no me dio tiempo a acabar la frase, el pitido que daba por finalizada la llamada me interrumpió. Solté una pequeña risa, sería divertido ver a Damon cabreado y a la vez conteniéndose para dar una buena imagen.
Continué caminando por las calles parisinas sin rumbo fijo. Mañana nos iríamos a Venecia, tenía que aprovechar al máximo. Algunas personas me saludaban al pasar con una sonrisa, me sorprendió lo amable que era la gente de Francia y el buen sentimiento que transmitían.
Llegué al Barrio Latino antes de poder darme cuenta. «Madre mía, ¿cuánto llevo caminando?». Al entrar vi muchos puestos de comida de diversos tipos. Me recordaba al mercadillo de Florencia, pero a gran escala y con más comida. También había puestos de artistas ambulantes increíbles, algunas de esas obras deberían estar en museos y no en la calle.
Al ir llegando al centro vi más revuelo. No me extrañó, allí estaba el metro y había un movimiento continuo de masas. Lo que sí que me extrañó fue ver una ambulancia y algunos oficiales alrededor de un bar cerca del Jardín de Luxemburgo. A medida que me acercaba el bullicio era mayor. La opresión en mi pecho fue creciendo cuando me pareció ver a Enzo en la puerta hablando con un oficial. Parecía muy cabreado discutiendo con el policía, quién trataba calmarle para no montar alboroto. Sin controlarlo, mis pies me fueron acercando cada vez más a ellos.
—¿Elena? ¿Qué haces aquí?—me giré al escuchar aquella voz.
—¿Nik?—me acerqué sin pensarlo y le abracé fuertemente—¿Qué haces tú aquí?
ESTÁS LEYENDO
El Doctor de Ojos Azules [TERMINADA]
FanficElena despierta en un hospital, sin memoria. Poco a poco irá recordando experiencias, personas, el por qué de su amnesia...Pero, ¿podrá soportarlo? Su médico, un apuesto moreno ojiazul, se entregará en cuerpo y alma para ayudarla. Os animo a descub...