Cantar junto a Alonso, fue más que maravilloso, no podía creer que cantará tan bien. El timbre del departamento hizo que el rubio se pusiera de pie rápidamente y corriera a abrir la puerta, lo seguí solo para ver como su rostro cambio de una gran emoción a casi una decepción.
-¿Freddy?- dijo el rubio.
-¿Así recibes a tu amigo el más guapo y al que no ves por casi dos años?- dijo el rizado.
El rubio volvió a cambiar la expresión en su rostro para mostrarse más alegre, abrazo a Freddy fuertemente, al verme el rizado separo el agarre con Alonso y me ofreció las bolsas donde se encontraba la comida que le había pedido comprar.
-Lo siento, no pude encontrar nada que no fueran hamburguesas, espero que no le moleste.
-Ya te dije que puedes tutearme, tenemos la misma edad- dije avergonzado.
-¿Ustedes se conocen?- pregunto el rubio
-Freddy trabaja en la empresa, mi hermana le pidió que trabajara conmigo algunas cosas sobre la compra de Dulces Besos- explique.
-Es mi Jefe, pero no quiere formalidades- dijo el rizado mientras ponía sus ojos en blanco.
Alonso comenzó a reír y juro por mi vida que nunca había escuchado una risa igual, era tan agradable que me daban ganas de escucharla siempre.
-Justo cuando Jos no podía lucir más como un hijo de papi- dijo burlón Alonso.
El rizado y el rubio fueron en dirección a la cocina para desempacar la comida que trajo Freddy, El timbre volvió a resonar por todo el departamento.
-Yo abro, no se preocupen, no necesito un abre puertas personal- grité mientras caminaba hacia la puerta. Un enorme ramo de girasoles fue lo primero que pude ver, después un rostro conocido se asomo detrás de las flores.
-Oh, lo siento, pensé que eras Alonso- dijo el castaño, que ahora tenía un gran mecho de cabello verde.
Una extraña sensación me inundo el cuerpo, era como si quisiera golpear a aquel chico, no lograba entender, pero creo que lo odio.
-Pasa- me hice a un lado- esta en la cocina, íbamos a cenar para celebrar- dije con una sonrisa forzada.
El castaño paso con el enorme arreglo florar, cerré la puerta y caminamos hacia la cocina, al llegar el rubio comenzó a brincar y mis ganas de querer golpear al castaño crecieron, ¿quién se cree?, apuesto a que yo podría comprar un ramo mucho más grande.
-¡Es hermoso, muchísimas gracias Bry!- grito el rubio mientras lo abrazaba.
-¿Por qué girasoles?- pregunto Freddy
-Porque las rosas son exclusivas para mi rizado novio- dijo coqueto el castaño.
Tarde algunos segundos en procesar lo que acababa de ver, pero necesitaba confirmar mi nueva teoría.
-Alón- susurre- ¿Ese es el novio de Freddy?
El rubio me miro un poco sorprendido por mi pregunta.
-Sí, desde que los conozco son novios.
No podía evitarlo, pero una enorme sonrisa apareció en mi rostro, esa rabia que sentía al ver al castaño se convirtió en una gran alegría.
-Freddy, dale una hamburguesa, seguro tu novio tiene hambre- dije sonriente, pude sentir la mirada extrañada de ambos chicos, pero no me importaba, estaba feliz, Alonso no estaba con ese castaño, es mucho para él.
...
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Recetas para un mal de Amores.
Hayran KurguAlonso fue el mejor promedio de su generación, se ha comprometido con su novio Abraham y ha conseguido trabajar junto a la Chef que más admira. Jos esta a punto de terminar sus estudios, ha terminado con su novia y tiene que empezar a ver por la em...