INCOMPATIBLES (completo)

Epílogo

10 años más tarde

Me encontraba en el sofá sentada. Mi gran barriga no me dejaba hacer nada. Si, estaba embarazada de mi tercer hijo o hija.

- Mamá, tengo hambre - me dijo mi hijo Harold de ocho años.

- Y yo mami - me dijo mi hija Brooke de cinco años.

- Ya chicos pero tenéis que esperar a que lleguen todos los demás, no podéis comer antes - les dije dándole un besito a Brooke y revolviendo el pelo de Harold.

- ¡Ala! ¡Ya está lista la mesa! Ojalá lleguen pronto, me muero de hambre - dijo mi esposo entrando a esta habitación - ¿Necesitas algo? Te veo pálida.

- No Mark. Es solo que este embarazo me está costando más que los demás - le dije y se sentó a mi lado cuando nos fundimos en un cálido beso.

- Aggg parar ya - dijo asqueado Harold. Y los demás reímos.

- Tu haces lo mismo con tu novia - dijo Brooke con tono superior.

- ¡¿Tienes novia?! - le dijo Mark - ¡Este es mi chico! - dijo riendo.

- ¡Eh! - dije y le pegué un pequeño puñetazo en el hombro. Y entonces sonó el timbre.

Todos fuimos a abrir y allí se encontraban Jess y Erick con su hija Skyler, de la misma edad que Harold y Mason con su mujer embarazada.

- Has engordado - dijeron Jess y Mason a la vez.

- Ya tenía que estar el comentario de los imbéciles, digo... De los tontos - dije dándome cuanta de que los niños estaban allí.

- ¡Bienvenidos! - les saludé. Todos nos saludamos y abrazamos - Pasar al comedor - les dije mientras volvía a abrir la puerta que había vuelto a sonar.

Allí estaban Tyler y Hannah con sus hijos gemelos y Simon. Por detrás venían Dereck y Peter. Venían solos aunque los dos tenía novia.

- Hola sister - me dijo Peter.

- Hey gordi. ¿Lo pillas? Gordi de gorda - dijo riéndose.

- Y yo que pensé que era un  apodo cariñoso - le dije melancólica.

Luego llegaron Dakota y su marido Luca, si, ese que me vio desnuda hace unos doce años que venían con sus tres hijos. Dos de diez años, que eran mellizos,  y otra de cinco. Y luego llegaron Margareth junto con Paul. Lo había pasado mal ya que no podía tener hijos pero lo había superado.

Todos nos sentamos en la mesa a comer. Había preparado de primero una crema de espárragos y de segundo costillas con salsa barbacoa.

Hablábamos de muchas cosas y  reíamos de lo que nos decían los niños.

Más tarde los niños se fueron a jugar todos al escondite y nos quedamos los mayores.

- Riquísima la comida Ally - dijo Jess.

- Me ha ayudado mucho Mark - dije y noté unas leves contracciones en el vientre pero no las hice caso.

- Ayer nos compramos una piscina para nuestro jardín - dijo Hannah - estáis todos invitados para cuando queráis venir, a los niños les encantará - dijo ella. Y la tripa me dolió más.

- ¿Ally? Estás pálida - dijo Dereck.

- Tranquilo, es que este embarazo se le está haciendo difícil - dijo Mark pero de repente rompí aguas y todos se quedaron alucinados.

- ¡Al hospital! - gritó Mark - cariño a tener otro hijo - dijo él feliz.

Nos montamos en el coche y fuimos al hospital todos salvo Paul y Margareth que se habían quedado cuidando a los niños.

Cuando llegamos a mi me llevaron a una habitación y allí me pusieron la epidural. Iba a dar a luz ahora mismo.

- ¡Suerte guapa! - me dijo Mark al lado mío mientras me acariciaba la mano. Él estaba más nervioso que yo y eso me hacía reír aunque me dolió la tripa y tuve que aguantarme las ganas de reírme.

Empecé a empujar. Y me dolía mucho. Empujé y empujé.

- ¡Vamos cariño! ¡No te queda nada! - me dijo Mark dándome ánimos y entonces escuché el llanto del bebé. De mi bebé.

- ¡Es una chica! - dijo la enfermera. Mark y yo nos miramos y a la ve dijimos.

- Annie - y nos reímos pero yo estaba agotada del parto.

- Lo has hecho genial cariño - me dijo mi marido.

Cuando lavaron a Annie me la devolvieron para que la tuviera en mis brazos y la cogí. Era preciosa. Tanto como mis otros hijos.

Mark me besó y fue una sensación genial y allí te planteas varias cosas. La vida sin problemas es aburrida, sosa, fácil y sencilla. Necesitas problemas para disfrutar realmente de ella y conocerte a ti mismo. Saber cuáles son tus errores y tus ventajas. Tal vez con problemas pensemos que estamos hundidos y que no hay solución pero siempre hay una y siempre se puede ir hacia arriba. Gracias a estos problemas Mark y yo estamos juntos ahora y por el resto de los tiempos, éramos incompatibles, pero los polos opuestos se atraen. Cada uno elegimos nuestra vida y como queremos que sea. Tu decides. Yo decidí, y aunque tuve muchos problemas de por medio todo se arregló y aquí estoy con una familia hermosa y con unos amigos geniales. ¿Que más puedo pedir?

FIN