Encadenada

*¿De qué están hablando?* (25)

Me había quedado inmóvil en el suelo. Mis pensamientos daban vueltas en mi cabeza, pero aun con mis preguntas, mi mente no producía ninguna respuesta.

Mire a mi alrededor y algo llamo mi atención. ¿Qué era eso que sobresalía? Me levante y me dirigí a la tubería que estaba a centímetros del suelo. Había algo que salía detrás de ella y puse mis dedos para saber lo que se encontraba ahí. Al lograr mi objetivo vi que era un trozo de tela enrollada y me dispuse a ver que tenía, sentándome en el suelo nuevamente.

Antes de ni siquiera abrir la tela enrollada, la puerta de la habitación se abrió por completo y mi mirada se dirigió directamente a lo que lo había producido. Me quede sorprendida al ver que nadie se encontraba tras de ella y dando me prisa escondí el trozo de tela dentro de la manga de mi ropa.

Mis piernas temblaban pero aun así me levante y me asome por la puerta. Quería estar segura de que en verdad no había nadie. Mirando a la derecha no se encontraba nadie pero cuando mire a la izquierda me di cuenta que había dos hombres que caminaban con dificultad, tropezándose con las paredes.

Al parecer los que abrieron la puerta habían sido esos dos hombres. Mi corazón se calmó en cierta manera, tenía miedo de que fuera ese hombre al que llamaban “Señor” o… algo peor.

Deje de mirar a esos dos hombres y me dispuse a regresar con número 34. Cuidadosamente me moví por ese pacillo que parecía más largo a medida que daba pasos.

No me sentía del todo bien, mis piernas parecían no responderme… y mi vista empezaba a nublarse. Presione fuertemente el lugar donde había escondido el trozo de tela enrollada, y me apoye en la pared. Camine muy poco y caí al suelo con mi respiración agitada.

--oye mira…-- escucho una voz femenina—hay alguien que esta tirada es ese lugar.

--¿Dónde? ¡Ah! Ya la veo—no puedo ver quiénes son, pero si las escucho muy bien. Parecen ser que son dos mujeres—vamos. Apresurémonos para ayudarla.

--pero… quizás nos metamos en problemas. No sabemos quién es—la primera mujer parece angustiada por lo que vaya a suceder—yo digo que mejor nos vayamos…

--no digas estupideces... sabes que nos apoyamos entre nosotras.

--… si, lo sé.

No pasa mucho tiempo cuando ellas tratan de ponerme de pie, pero cuando una está por hablar, todo se vuelve negro.

--¿Dónde la encontraron?

La voz de alguien me despierta. La silueta de tres mujeres es lo único que logro ver. Una está sentada a mi lado, al borde de la cama, mientras las otras dos están sentadas afrente de la que está más cerca de mi.

--la encontramos en el ala B… la trajimos contigo Cala, por que eras la única Doctora.

--no digas eso—responde la chica que esta sentada junto a mí—solo se un poco de medicina. Eso es todo—hace una pausa y luego vuelve a hablar—lo bueno es que ya está bien.

--¡Ay! ¿Por qué son así? Usted y Iris siempre…

--¡cállate ya, Lila! En verdad que a veces eres irritante con tu voz chillona.

--¡eso no es cierto Iris!  

--ya cálmense las dos, y… hagan silencio—reprende a los dos chicas que están al frete de ella—no se dan cuenta que ella sigue dormida. Deben hacer silencio, además… ¿no notan algo raro en esta chica?

--lo único raro que noto es su vestimenta, eso es todo—dice la chica con la voz más chillona y un poco molesta.

Decido seguir escuchándolas y finjo que sigo dormida. Algo me parece que no está bien…

--si… lo mismo pensé—responde la mujer que está a mi lado. Ahora que noto su voz es más madura—creo que esta chica no pertenece aquí.

--¿A qué te refieres?—pregunta la chica con la voz no chillona. Unos segundos después su voz se escucha nuevamente pero con tono de sorprendida—eso quiere decir que esta chica viene…

--si, exacto esta chica viene de los Calabozos—dice la mujer a mi lado.

--¡no! Entonces yo tenía razón. Esta chica nos meterá en problemas. Antes de que sea tarde, debemos reportarla al Vigilante.

¿De qué están hablando? …no entiendo pero parece que algo malo saldrá si dejo que me reporten al ¿Vigilante?

--cálmate Lila, me pones nerviosa cuando te sobre saltas… pero tienes razón ¿Qué hacemos Cala?

Antes de que ellas tomen una decisión, decido dejar de fingir que sigo dormida y con algunos quejidos míos, llamo su atención.

--¿Dónde estoy?—trato de sentarme en la cama y colocando una mano en mi cabeza, les hago pensar que recién estoy despertando.

--miren ya se despertó. Iris ¿qué hacemos ahora?

Trato de levantarme de la cama, lo que produce que la mujer a mi lado se ponga de pie.

--tranquila. Ven te ayudo a levantarte—me dice la mujer con cabello corto encima de los hombros—mi nombre es Cala. Ahora mismo estas en mi habitación—me dice ayudándome a levantarme—estas dos chicas te vieron desmayada en el pasillo—señala a las dos chicas, las cuales se ponen de pie al mismo tiempo.

--hola, mi nombre es Iris ¿ya te encuentras mejor?

--eso no importa ahora. Nos meteremos en problemas—dice la que creo yo, se llama Lila—apresurémonos y saquémosla de aquí.

El miedo me invade y siento que no debería de estar aquí. No quiero meterme en problemas pero ahora mismo ellas eran las que elegían.

Cala me mira y suspira después—creo que deberíamos…

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Hola cositas hermosas. Por favor no me maten, se los pido... Me tarde muchisimo en subir este capitulo (si, lo se, soy muy irresponsable)  pero hay una explicación. Me quede sin internet por casi dos semanas   y por eso no pude subir el capitulo.

Pero bueno... aqui tienen el capitulo y espero les allá gustado.

Los quiero mucho lectores y esto no volverá a pasar lo prometo. Subiré un capitulo cada semana y si estoy muy inspirada puede que sean dos en una semana (pero eso ya veremos) Tambien tratare de hacerlos más largos para que no se pierdan de ningún detalle.

《☆besos y abrazos☆》