Míngwáng

Parte III

Elle dejó las llaves en la mesa del living y buscó la medicina de Near, antes de dirigirse a su habitación. Había llegado justo a tiempo para dársela.

Caminó de manera sigilosa por el pasillo y abrió la puerta lentamente.

Observó a su hermano armando una estructura con dados, estaba ubicado en medio de ella y parecía confundirse con lo blanco de cada una de esas piezas. Incluso, la gasa que Beyond había colocado sobre su cabeza luego de coserle un par de puntos para cerrar la herida, apenas podía distinguirse del color de sus cabellos.
Near, era un punto blanco en aquella oscuridad... el único nexo que mantenía unidos a Beyond y a él. Lo que le había dicho a Light hacía unas horas atrás, era cierto. Había tenido mucho miedo, por Near, porque otra vez su negligencia permitiera que le arrebataran a la única familia que tenía.

—Estoy consciente de que es la hora en que debo tomar el analgésico, no era necesario que dejases de lado tus asuntos por venir a dármelo- habló, Near, sin dejar de colocar los dados.

—No considero que haya algo de malo en que yo te lo dé.- respondió y acercándosele con cuidado de no voltear nada, le entregó la pastilla y un vaso de agua.

Le miró en silencio tomársela y recibió el vaso vacío de vuelta. Near continuó con lo que estaba haciendo y él se dispuso a marcharse de allí.

—Elle.

— ¿Sí?

—Gracias.

Elle esbozó una pequeña sonrisa y abriendo la puerta, salió de la habitación.

Caminó en la oscuridad del pasillo, hasta llegar a la sala de estar. Colocando el vaso sobre la mesa ratona, se descalzó y tomó asiento en uno de los sillones. Apretó sus rodillas contra su pecho y se mordió el pulgar con cierto nerviosismo.

Se sentía abatido. La consciencia del curso que estaban tomando todos los acontecimientos en su vida, estaban agotándole. Por un lado, estaba la insistencia de Near de no cambiar de institución; era imprudente por su parte el tomar la decisión de quedarse allí, pero Elle sabía que las posibilidades, de que hubiese una persona de su interés en aquel lugar, eran de un 98% Podía obligarlo a irse, después de todo, al ser su tutor legal, no había muchas cosas que su hermano pudiese hacer en contra de ello. Sin embargo, lo más factible era que dañase la frágil relación que ambos tenían y también, que las pocas oportunidades de vivir la vida de un adolescente promedio a las que su hermano podría llegar a aspirar, se viesen truncadas por el hecho de estar siempre huyendo de un peligro, cuyas dimensiones, quizás, exageraba. Pero... lo habían secuestrado. ¿Hasta qué punto, aquello, sería una exageración?

Elle suspiró sintiéndose frustrado. Intentar proteger a Near siempre, devendría en un desastre, pero ¿No era su tarea principal, el velar por su seguridad? La respuesta debería ser sencilla; afirmativa, por supuesto, sin embargo, regresando al caso de que hubiese una persona que hubiese llamado la atención de Near, la posibilidad de que su hermano pudiese establecer una conexión con alguien y con ello, crearse la oportunidad de no acabar sus días en completa soledad, provocaba que fuese más difícil el tomar una decisión. Tal vez, lo más óptimo sería investigar la existencia y la identidad del supuesto individuo.

Por otro lado, estaba Light. Aquella repentina visita a la casa de sus padres no había hecho más que acrecentar sus sospechas sobre él, entrando en la cuenta de que, quizás, sus pasos le estuviesen guiando hacía Beyond. Después de todo, la sutil referencia hacia la familia, no hacía más que crear la situación propicia para que conversaran de la suya propia. Aquella ligera muestra de interés que Yagami había manifestado tener hacia sus progenitores, (al hablar de la relación que él mantenía con los suyos y, por ende, dando paso a que hiciera lo mismo), le daba a entender que en esos momentos poseía cierta información que, seguramente, estaba ligada a los beneficios que pudiese obtener, cosa que dejaba en claro que, quien era su cómplice, no le había confiado todos sus secretos.