Parte II

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Light se paró frente a la puerta del departamento por unos instantes, dudando de ingresar allí. Era consciente de que si lo hacía sería el fin, sin embargo, el sentimiento del deber lo obligaba a querer bajar la manija. Despacio, como si el tiempo le pesara, abrió la puerta y lo miró, sentado allí en frente de la pequeña mesa de la cocina, formando una torre con lo que habían sido los pequeños contenedores plásticos de varias mermeladas individuales. Curiosamente, reunía en él las características preponderante de las manías de sus hermanos.

Sus ojos negros y vacíos se alzaron en su dirección, cuando consiguió que la torre se mantuviese en equilibrio, y Light sintió que en el mundo solo estaban ellos dos. Su corazón latió con fuerza, recordándole cuanto lo había extrañado y su tristeza, tuvo tintes de una extraña alegría. Quería abalanzarse sobre él, estrecharle entre sus brazos, decirle que lo amaba, que su ausencia había sido dolorosa y que lo había echado de menos hasta lo indecible. Sin embargo, sus pies permanecieron anclados al piso y su boca se secó hasta tener una sensación pastosa en la lengua, tenía tanto por decir, pero las palabras no querían salir.

—Yagami- habló él de repente, con cierto reproche empañándole la voz, esa que siempre se había caracterizado por mantener la monotonía. Estaba enojado, era más que obvio.

Light avanzó hasta la mesa y tomó asiento. Después de todo, no debía pedir permiso para hacerlo en la que alguna vez había sido su casa. Esbozando una de sus sonrisas más cálidas e inocentes, se dio valor, al fin, para hablar.

—Buenas noches, Ryuzaki. ¿A que debo el que repentinamente te hayas acordado de mí?

—Agradecería a Light, que evite fingir conmigo- respondió volviendo su atención a la torre, para comenzar a desarmarla con delicadeza.

—No sé a lo que te refieres.

—Estoy consciente de que ha sobornado al juez que llevaba el caso de Beyond.

Light fingió sorpresa, a pesar de que Ryuzaki no lo mirase directamente a los ojos.

— ¿Por qué querría hacer eso?

—Simple- dijo él alzando nuevamente los ojos —Si se condena a Beyond Birthday por el asesinato de Lisa Lindal, el caso quedará cerrado y las sospechas que pesan sobre la cabeza de Light, perderán peso.

—Tu insistencia en la teoría de que pertenezco a "Míngwáng" se está tornando demasiado molesta. Si me has llamado únicamente para eso, será mejor que me marche.- respondió poniéndose de pie y girándose para dirigirse hacia la puerta.

Era un cobarde, estaba huyendo, porque por primera vez no podía enfrentarse al sacrificio que requerían sus planes.

—Lo tergiversaré todo, Light- dijo Ryuzaki y el aludido se volteó a verle. Se había puesto de pie y había avanzado unos pasos en su dirección, para evitar que se marchara.

— ¿A qué te refieres?- preguntó incrédulo.

—Carezco de pruebas en tu contra, es por ello que tergiversaré todo, de ser necesario falsificaré la información para que caiga sobre ti la acusación de ser líder de "Míngwáng"

—No soy el líder de "Míngwáng" Ryuzaki- dijo tratando de mantener la calma. Si llamaban demasiado la atención, sería perjudicial.

—Eso carece de importancia... Si B. muere...

— ¿Serías capaz de sacrificar miles de vidas, solo para salvar la de tu hermano?

—De ser necesario, lo haré.

MíngwángDonde viven las historias. Descúbrelo ahora