Míngwáng

Parte V

Light condujo por las calles tratando de no llamar la atención. Marcando un número en su celular y a riesgo de obtener una infracción, esperó un par de tonos hasta que la voz de la contestadora sonó

¡Buen momento el que había elegido la estúpida de Misa para no atender el teléfono!

Según recordaba, tendría un rodaje.

"¡Mierda!"

Doblando en la calle del edificio en donde vivía Takada, dejó estacionado su vehículo en cualquier parte, antes de bajar de él y dirigirse a la puerta, en donde fingió esperar a que alguien bajara a abrirle.

—Déjeme que la ayude. Mi novia parece que va a tardarse- le dijo sonriendo amablemente a una mujer cargada con cajas y bolsas de supermercado.

—Muchas gracias- respondió ella y abriendo la puerta con la llave magnética, esperó a que él la sostuviera para poder entrar.

— ¿Seguro que puede sola?

—Sí, gracias- respondió y se marchó con todas sus cosas, sin esperar a que la abertura se cerrase.

Aprovechando la oportunidad, Light se adentró en el edificio y subió al piso en el que se encontraba el departamento de Takada.

Sintiendo su corazón latir frenético, observó el número 13 en color dorado que relucía sobre la superficie blanca de la puerta. Colocando su mano en el picaporte, tomó aire antes de bajarlo deseando no tener que verse obligado a forzar la cerradura. Por suerte, la abertura cedió y le dio paso al lugar. Ingresando en el, se encaminó, por los pasillos oscuros, rapidamente hacia la habitación en donde, sabía, se encontraba la biblioteca. Buscando entre los libros, halló al fin la maldita caja fuerte. Introdujo la clave y logró abrirla.

Dentro de ella, había un par de documentos que revisó y descartó de inmediato tirándolos al suelo, hasta que dentro de una pequeña bolsa plástica y transparente, se encontró con la llave.

Suspirando aliviado la sostuvo entre sus dedos unos instantes antes de continuar mirando dentro del interior de la caja para encontrar alguna información sobre el banco. En ese mismo instante el sonido de varios seguros de armas siendo quitados, provocó que se voltearse para encontrarse con los agentes, Linder, Hiurt, Rester y Gevanni apuntándole con sus 9 mm y al repelente hermano albino de Elle sonriendo victorioso.

— ¿Qué hacen aquí?- preguntó tratando de hallar una forma de escapar de la situación. Su mente trabajaba a una velocidad vertiginosa.

—Estas arrestado, Yagami.- habló Near

— ¿Arrestado?- preguntó haciéndose el desentendido.

—Eres líder de "Míngwáng" y has sido el autor intelectual del homicidio de Lisa Lindall

Light comenzó a reír.

— ¿Yo? ¿Líder de "Míngwáng"? ¿Autor intelectual del homicidio de esa mujer?

—Kiyomi Takada ha hablado, Light. Y hemos obtenido la investigación de Lisa. No tienes escapatoria.

El castaño abrió los ojos aterrado y cubriéndose el rostro, volvió a reir. No había escapatoria, el fin había llegado, a menos que se explicara ¡Sí, eso era! Ellos comprenderían lo que hacía, Míngwáng era la respuesta para acabar con el mal que aquejaba a las sociedades día a día.

—No puede ser cierto... Yo... No lo comprendes ¡Lo que hago por el mundo! ¡YO SOY LA JUSTICIA!

— ¡Eres un asesino, Yagami y por eso recibirás pena de muerte!- sentenció el albino de manera gélida.

¿Asesino? ¿Lo estaba llamando asesino? Él no era un asesino... él estaba salvando al mundo de perderse en medio de las tinieblas. Estaba convirtiéndolo en un lugar mejor. ¿Cómo se atrevía a llamarlo así? ¿Cómo podía ser posible que lo hubiesen atrapado?

Llevándose las manos a la cabeza se tiró de los cabellos de manera frenetica ¿En que había fallado? Se suponía que todo saldría bien... ¿En qué momento le tendieron la trampa? ¿Cómo pudo permitir que lo manipularan así? ¡Maldita sea! ¿Cómo no lo había visto venir?

Elle...Había matado a Elle... su Elle.

—No ha valido la pena- susurró al borde del llanto y la locura, sintiendo su corazón deshacerse dolorosamente.

Iba a morir también. Después de luchar tanto... iban a matarle, iba a ser un número más en la larga lista de muertes sin importancia.

Light respiró de manera agitada y se volteó tratando de encontrar una salida. Rápidamente y sin dar tiempo a nada, sacó un arma que llevaba en el bolsillo y girándose disparó en contra del albino observándolo caer y recibiendo balazos a cambio.

La caída ocurrió en cámara lenta, al cerrar los ojos, le pareció ver a Elle. El final era doloroso y sabía a melancolía.

***

N/A:

Capítulo muy cortito ¿por qué? No hay porqué... ok, no. No se si vieron ese video XD

Les quería decir, que el próximo capítulo ya es el final... D:

Pero no se asusten, como todos los capítulos hasta ahora, estará compuesto de varias partes, así que todavía hay "Míngwáng" para rato... bue, no tanto, pero en fin...
Muchísimas gracias por leer esta historia ♥

Hasta la semana que viene, si no me secuestran los aliens o algo parecido :p

Saludos n.n/