Light observó furioso el pequeño frasquito que contenía el nuevo formato de la formula, antes de guardarlo en el bolsillo de su traje y caminar por el pasillo de la prisión, hacia la sala de visitas. Mikami se lo había dado hacía tan solo un par de semanas y luego de eso, había desaparecido por completo.
Según informes de Takada, aparentemente, Teru había escapado luego de incendiar su casa y con ello pruebas que lo incriminaban incluidos, también, varios de sus hombres. Por supuesto que esa teoría absurda no convencía a Light, además, no había escuchado que algún equipo antinarcóticos estuviese tras su huella, sin embargo, Mikami tenía demasiados enemigos como para tomar el tema a la ligera.
Por eso estaba allí, por eso había ido a verlo.
— ¿Acaso Kira no tiene amigos?... Lo comprendo, su hipocresía lo vuelve un joven bastante desagradable- dijo Beyond y sonrió burlonamente.
— ¿Cómo estas llevando tu sentencia?... Te quedan pocas semanas- preguntó con simpleza y tomó asiento frente a él.
—La muerte... Es un asunto interesante. Gracias por preguntar ¿A que debo su agradable visita?
—Mikami Teru... Ha escapado- soltó sin preambulos y se concentró en las expresiones de B. a pesar de ser consciente de que no esbozaría ninguna.
— ¿Mikami Teru?... Mmmm, no me suena- respondió con aires fingidos.
—Sé que has tenido algo que ver con esto.
— ¿Yo?- sonrió B. de manera ladina —La prisión no es un lugar que permita a uno tener muchos planes.
—No te esfuerces por engañarme, ambos sabemos lo que has hecho.
— ¿Por qué Kira es tan insistente con sus visitas? ¿Por qué inventa excusas todo el tiempo para verme?... A caso ¿Le gusto?
Light soltó una pequeña risilla.
—Estas desviando el tema de conversación... Una táctica bastante mala de tu parte.
—Ha de ser porque el dialogo que mi interlocutor propone, carece de atractivo alguno. Dime, ¿Crees que mi hermano se está volviendo viejo y prefieres una versión más joven de él?... Está a la vista que eres muy superficial.
Light se puso de pie lentamente. Lo sabía, no hacía falta escarbar más en el asunto, Beyond había tenido que ver con la desaparición de Mikami, de seguramente, este ya estaba muerto y eso era un problema.
—Agradezco que me brindes tu tiempo... ¿Te has preguntado el porqué de que jamás te rehúses a recibir mis visitas?... Estás tan aburrido como yo. En esencia, somos bastantes parecidos- dijo a pesar de odiar compararse con él. Sabía que eso lo enfurecería y el ser consciente de que el encierro funcionaba para enloquecerlo, le daba alivio. Odiaba a B. quizás, de manera un poco injustificada, puesto a que había criminales mucho peores que él.
—Es curioso... Que compares a un asesino contigo mismo- soltó sonriendo.
—La diferencia radica en el justificante... y en que uno de los dos, morirá pronto- respondió burlón y se encaminó hacia la salida.
**
Al regresar a prisión, tuvo que soportar las ganas de asesinar al guardia Grass por reprenderle como si de un niño se tratase. El hombre estaba muy enojado, porque había tenido que justificar los días demás que Beyond había pasado en la sala de castigos. Sin embargo, la situación se normalizó con el correr de los días. Hasta que recibió una de las tantas visitas de Yagami, las cuales, se estaban tornando una costumbre muy molesta de su parte.
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Míngwáng
Fiksi PenggemarUn detective. Un forense. Un estudiante de secundaria. Una organización dedicada a acabar con los criminales. Una venganza. Un amor imposible, uno improbable y otro inseguro.