Laisa
- La señorita y yo tuvimos un desafortunado accidente en el área de bocadillos- Anton le explica con voz segura- Sin querer la he manchado de jalea y vinimos aquí para que pudiera limpiarse, apartada de las miradas curiosas.
- Entiendo- Responde distraídamente mirándonos alternamente.
Mis ojos se niegan a mirarlo y cuando finalmente lo hago me quedo sin aliento.
Trae puesta una playera sunstopper de manga larga blanca, pantalones negros, una casaca negra y botas de equitación.
Siempre va vestido con colores oscuros y ahora lleva esa playera blanca que le aporta más luz a su rostro y cabello, tengo que mirar dos veces para notar como se le marca exquisitamente el pecho bien definido a través de la tela blanca.
Su cabello está perfectamente peinado hacia atrás, se ha afeitado y luce tan solemne y poderoso al punto de parecerme irritante.
- ¿Señorita Laisa? - Me llama.
- ¿Si señor? - Le respondo distraídamente.
- Vuelva con mis hermanos, no deben estar solos- Me mira incomodo al notar como lo detallo.
¿Me vi muy pervertida?
- Así lo haré señor-Respondo educadamente recobrando la compostura.
- Su madre lo está buscando, joven Kapoor, será mejor que vaya con ella. -Se da media vuelta y se retira sin decir más.
- Tengo que irme- Se apresura Anton- ¿No hagas cosas estúpidas de acuerdo? Estaré alerta, envíame un texto si necesitas algo.
- Lo haré, gracias.
Yo también me apresuro a regresar con los príncipes, tomó las tasas de té que deje atrás y me apresuro a la carpa de la familia real.
- ¡Pensé que ya no regresarías! - Elis salta cuando me ve.
-Tuve un contratiempo, mis disculpas.
La gente sigue llegando y los príncipes siguen saludando a los recién llegados, momento que aprovecho para mirar a mi alrededor en busca de Nicholas.
La forma tan calmada en la que interrumpió mi conversación con Anton todavía me da escalofríos, pero aun así se las arregló para echarlo fuera de escena.
No parece estar a la vista, pero si veo a los ayudantes del palacio quienes traen a los caballos que serán usados para el torneo, eso quiere decir que no falta mucho para que comience el evento, los amarran cerca de la carpa de la familia Agriche y es una oportunidad que debo aprovechar.
- Elis...
- ¿Que pasa bonita?
- ¿Quieres ir a ver los caballos? - Me siento un poco mal por usar a este terroncito de azúcar para mis planes, pero no tengo muchas opciones.
- ¡Si! ¡Quiero ver a tornado antes de que se vaya!
- ¿Tornado?
- Es el caballo de mi hermano mayor- Explica Einar.
Creí que no nos estaba prestando atención, su vista está clavada en el libro que tiene entre manos, pero tal parece que sus oídos están atentos a las conversaciones que suceden a su alrededor.
- ¿Quieres venir con nosotros príncipe? - Levanta la vista del libro y me mira brevemente, después mira a su hermano quien lo observa con ojos brillantes y resoplando deja su libro de lado y se pone de pie.
Salimos de la carpa y Elis me toma de la mano mientras caminamos, por su parte Einar camina tranquilamente delante de nosotros.
- Joven maestro Einar- Un hombre entrado en edad saluda al enano gruñón cuando llegamos al lugar.
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Jaulas de Noche
RomanceCuenta la leyenda que un príncipe una vez se enamoro, y no supo que demonios hacer con ese vacío en su estomago. Cuentan que la miraba con ojos de ángel y que al tocar su piel se quemaba de pasión, cuentan que conoció su propio infierno, en la boca...